Poco a poco México se convirtió un en un gran paraíso para los jugadores extranjeros. Sus políticas de inclusión hicieron que los dirigentes exageren la cantidad de no nacidos en el país y hasta que se dude de la capacidad de los jugadores aztecas. Un repaso por este gran manoseo.
El pasado 9 de Enero dio inicio el Torneo Clausura 2015 de la Liga MX, donde algunas escuadras pelearán el título, mientras que otras más tendrán la prioridad de luchar por su permanencia en Primera División. Cada equipo confeccionó el cuadro que los lleve al éxito de sus aspiraciones.
Un total de 144 futbolistas no nacidos en territorio nacional mexicano participarán en el torneo y se destacan la presencia de 42 elementos naturalizados mexicanos, quienes permiten a sus respectivos equipos seguir haciéndose de jugadores foráneos para apuntalar sus plantillas.
De estos 144 jugadores, Xolos es quien más aporta, con 13 elementos, le siguen Tigres con 11; América, Jaguares y Puebla con diez futbolistas; Pumas, Monterrey y Veracruz cuentan con nueve, mientras que, Atlas, Cruz Azul y Gallos registran ocho; Leones Negros y Morelia tienen siete no nacidos en México, seguidos por León y Pachuca con seis cada uno; Toluca y Santos tienen cinco y completan la lista las Chivas, con dos jugadores. Cada equipo tiene derecho a utilizar hasta cinco elementos extranjeros, siendo Chivas el único que, por tradición, no cuenta con ninguno de ellos.
Extranjeros
Son 81 los extranjeros dados de alta por la Liga MX para disputar el próximo certamen. En el Apertura 2014, eran 114 los jugadores forasteros en el balompié mexicano, lo que significa un aumento de 32 futbolistas más, principalmente por las plazas que liberaron los naturalizados.
Argentina es la nacionalidad de 44 de los futbolistas que participarán en el Clausura 2015, le sigue Colombia (25), Brasil (14), Ecuador (12), Paraguay (12), Uruguay (6), Chile (4), Venezuela (1), Panamá (1), Inglaterra (1), España (1) y Cabo Verde (1). De Estados Unidos hay 14 jugadores, pero la mayoría son futbolistas que cuentan con doble nacionalidad mexicana-estadounidense
Naturalizados
Para que un jugador no nacido en nuestro país pueda participar en la liga como mexicano, deberá cumplir diez torneos consecutivos en México, así como tener en regla sus documentos de naturalización.
El Clausura 2015 se jugará con 42 futbolistas naturalizados mexicanos, siendo el actual campeón, América y el conjunto chiapaneco, quienes más reúnen entre sus filas (5), les siguen siete clubes con tres y otros cinco equipos con dos, completan la lista León y Toluca con un naturalizado cada uno.
Para este torneo son 35 los jugadores que consiguieron su carta de naturalización, aunque otros más como Franco Arizala, Paulo da Silva, Joao Rojas y Leonardo Cufré ya están en proceso de obtener la carta que los hace mexicanos, pero podrán dejar su plaza de extranjero hasta el próximo torneo, según el reglamento.
Mexicanos no nacidos en el país
Aunque no es muy común, algunos equipos suelen apuntalar sus plantillas con jugadores que, a pesar de no haber nacido en México, poseen la doble nacionalidad producto de su ascendencia, algunos de ellos, incluso, han militado en algunos equipos desde sus fuerzas básicas.
Entre los 21 jugadores de esta sección, resaltan nombres como: Ventura Alvarado del América, Antonio Pedroza de Cruz Azul, Isaác Brizuela de Chivas, o el rojinegro Edgar Castillo, quien junto a Hérculez Gómez y Francisco Torres, defienden los colores de la selección estadounidense.
¿Mexicanos en desventaja?
Desde que la Liga Mx facilitó la alineación de naturalizados, primero con un límite de tres, y este año sin restricción, han surgido puntos de apoyo pero también de rechazo a esa posibilidad. "La calidad es lo que importa, y no la cantidad. Es mejor que vengan pocos y buenos extranjeros al fútbol mexicano, a que traigan tantos y malos, mediocres. A cambio de una gran cantidad de jugadores, se pierden las oportunidades del jugador mexicano", dijo el comentarista Carlos Albert, quien fuera futbolista y llegara a ser seleccionado mexicano.
"A un joven mexicano que debuta no le tienen jamás la misma paciencia que la que le ponen a los jugadores extranjeros que contratan. Como ya pagaron mucho dinero, entonces hay que ponerlos a jugar, aunque no jueguen bien, porque después hay que revenderlos”, dijo Albert. Por otra parte, más allá de ver con recelo la creciente ola de extranjeros y naturalizados en la Liga MX, en selecciones nacionales ven con agrado ese "boom", pues creen que con ello aumenta la competencia.
El Director de los combinados tricolores, Héctor González Iñárritu, aseguró que están lejos de sugerir un límite para la "extranjerización" sobre todo en Primera División. "Estoy convencido, haya un naturalizado o diez, que los mexicanos, entre más competencia y presión tengamos, vamos a mejorar mucho", expresó el dirigente y agregó: "No puedes poner en zona de confort al jugador mexicano, lo tienes que poner en una competencia bestial".
En ello coincidió el entrenador del Tri Mayor, Miguel Herrera, quien descartó que este fenómeno atente contra la inversión de los equipos en Fuerzas Básicas. "Sí el jugador mexicano se pone las pilas y entra a competir y a generar mejores cosas tendremos mejores jugadores preparados", señaló el Piojo y sentenció: "También estamos empezando a exportar cada vez más, eso es bueno y ojalá sigamos con esto".
Ni siquiera para quienes dirigen a las Selecciones Menores, como Sergio Almaguer, timonel de la Sub-20, la situación de la Liga les parece cuestionable. "Pienso lo mismo, nosotros jugamos muchos años y si quieres ser titular en Selección, tienes que ser mejor que los extranjeros. Me parece que hasta llegan mejor los seleccionables y nos da más calidad en la competencia", aseguró. Han surgido otras voces como el DT de los Tiburones del Veracruz, el chileno Carlos Reinoso, que propone que la Copa Mx se ha jugada solo por mexicano, en busca darle proyección a los jóvenes en sus respectivos clubes.
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Miguel Herrera, el DT de la Selección Mayor. |
¿Quién se beneficia?
“Entre más movimiento haya en la compra-venta de jugadores, entre más se mueva el río de las contrataciones cada seis meses, hay directivos que se ven beneficiados económicamente (con el cobro de transferencias)", dijo Roberto Gómez Junco, exseleccionado y comentarista de la cadena ESPN. Decio de María, el presidente de la Liga Mx, dijo que en todas las ligas del mundo el objetivo de sus integrantes es ganar y generar espectáculo y que los clubes mexicanos tienen la misma tendencia siempre apegados a lo que dice su normativa y reglamento.
El periodista Alejando Gómez considera que integrar a naturalizados "eleva el nivel" de equipos nacionales, como han sido el caso de Inglaterra, Alemania o España, donde jugadores naturalizados han disputado Copas del Mundo en instancias finales. Pero Gómez Junco dice que "muchos se naturalizan nada más por conveniencia, al corto plazo". Sin un verdadero espíritu por la defensa de los colores nacionales.
Además consideró que las carreras de los seleccionados juveniles, campeones Sub-17 y de los Juegos Olímpicos, se ven obstruidas por los extranjeros: "No encuentran en dónde jugar en primera división del fútbol mexicano, porque hay cinco plazas que ya ocupan los extranjeros, más los que ocupan los naturalizados". El presidente de la Liga Mx por el contrario opina: "Lo que sí les puedo decir es que si jugaran once mexicanos en los 18 equipos permanentemente, no tendríamos una mejor Selección Nacional".
Fuerzas básicas como solución
Los Xolos de Tijuana fueron campeones en 2012 con un equipo de ocho no nacidos en México, pero aún no han surgido futbolistas destacados de sus fuerzas básicas. "Es más fácil recurrir al futbolista sudamericano, particularmente, que trabajar con los propios futbolistas, cuando siempre el trabajar en fuerzas básicas implica cosechar tiempo después lo que se va sembrando. No es el interés económico-deportivo del corto plazo, sino el trabajo bien sustentado que fortalecería en el tiempo largo”, afirmó Gómez Junco. El tema de los jugadores no nacidos en México siempre ha sido polémico en el fútbol mexicano, incluso desde la gestación de la época profesional de la Liga, en 1943.
Ante el gran número de extranjeros que había en el naciente campeonato mexicano, el presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Manuel Ávila Camacho emitió un decreto para limitar el número de foráneos, imponiendo en el Distrito Federal un mínimo de siete jugadores nacidos en México dentro de la cancha. Esta regla se respetó por varias décadas, mientras que en provincia se redujo a seis.
En épocas recientes, por ejemplo, previo al arranque del Torneo Apertura 2003, la Federación Mexicana de Fútbol puso como regla que cada equipo podía contar con sus cinco elementos extranjeros más un jugador naturalizado en la plantilla. Al año siguiente, se pensó en poner una regla que exigiera a todos los equipos mexicanos a alinear con un mínimo de seis jugadores nacidos en México.
Todavía para el año futbolístico de 2011-12, el jugador naturalizado tenía que esperar dos años adicionales a haber obtenido su carta de naturalización para jugar como mexicano en la Liga. Hoy en día, al momento de recibirla, previo al arranque del torneo, ya puede jugar sin ocupar plaza de extranjero y no hay un límite en las alineaciones. En el primer año del nuevo reglamento con naturalizados trajo un aumento de 22 jugadores no nacidos a México al torneo. El Apertura 2015 dirá si la tendencia de los equipos a invertir en extranjeros continúa, y qué consecuencias se verán en el corto plazo para los nacionales.
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