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El peso específico..

Arsenal derrotó al Cristal Palace en el coqueto Selhurst Park  por 2-1 y se metió en el tercer escalón de la tabla de posiciones. Su jerarquía hizo la diferencia frente a un rival al que le faltaron ideas, pero que mostró buenos argumentos..



La primera parte mostró a dos equipos muy comprometidos y que disputaron cada pelota como si fuera la última. La presión y la búsqueda de los espacios detrás de los laterales de los Gunners, Calum Chambers y Nacho Monreal, por parte del Cristal le dieron un dolor de cabeza constante a los defensores de la visita. El español fue quien sufrió los mayores problemas porque Wildred Zaha, con su habilidad y velocidad como armas principales, lo enloqueció sobre la banda. El inglés se movió bien y generó mucho peligro, pero jamás terminó de concretar una jugada. Cuando la lógica indicaba el centro, él enganchaba nuevamente y esto ocurrió sucesivamente. La seguridad de David Ospina en el arco le aportó al Arsenal la posibilidad de tranquilizar el juego, aunque el colombiano en este período no tuvo mayores incontenibles. 

Marcar en los primeros minutos le dio aire a los del norte de Londres. Una avivada de Danny Welbeck, quien aprovechó la siesta de Pape Souaré, hizo que el árbitro Mark Clattenburg dictara la pena máxima. Santy Cazorla cambió el fallo por gol, sin embargo los comandados por Alan Pardew no dejaron de intentar y el encuentro continuó por la senda en la que había comenzado, aunque, como dijimos, Arsenal estaba más relajado por la ventaja. Cazorla manejaba los hilos del equipo, seguido de cerca por una buena actuación de Francis Coquelin en la mitad de la cancha. Otro que mantiene y cada vez agranda más su figura es Alexis Sánchez. El chileno es pura dinámica y criterio, algo que se puede observar en el segundo tanto donde el ex Barcelona hizo la pausa, colocó un lindo pase para Welbeck este definió pero encontró a Julián Speroni y en el rebote la empujó Oliver Giroud. Gol del francés, organización del trasandino

La figura de Ospina creció paulatinamente en la segunda parte. El portero tuvo algunas grandes intervenciones frente a las arremetidas de los locales, que en los últimos cinco minutos del encuentro recordaron lo que era realmente atacar. En ese momento lograron descontar con un gol plagado de rebotes de Glenn Murray y una pelota que dio en el palo y le quedó en las manos del nacido en Itagüí. El Cristal nunca dejó de ir al ataque pero falló cada vez que pisó el área. La sensación general es que Zaha y Jason Puncheon, dos de los más incisivos en la delantera de los locales, tomaron malas decisiones a la hora de la definición y esto se trasladó al resto del equipo. El peso especifico terminó por ser la diferencia entre un conjunto y otro. Arsenal se acerca a los puestos de vanguardia aunque su juego no es brillante y necesitará de la aparición de Mesut Ozil, hoy de floja actuación, para dar un salto de calidad. 

El regreso de Jack Wilshere podría ser otra de las buenas armas que presenten los dirigidos por Arsene Wenger. El volante creativo inglés estuvo en el banco de suplentes y si se recupera de la mejor manera puede ser una gran incorporación para lo que resta de la temporada. Por su parte, el Palace con lo demostrado hoy tiene argumentos de sobra para ascender en la tabla de posiciones y alejarse de la parte baja. Para los Pistoleros esta jornada cerraría de la mejor manera si el Southampton no derrota o simplemente empata con el Liverpool mañana, ya que se quedarán entre los tres primeros de la Premier League. Un premio para una temporada algo irregular y que poco a poco parece mejorar..

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