Un sublime Kun le dio el triunfo al City ante el Bayern en el Etihad
Stadium. Dos fallos individuales fueron aprovechados por el delantero
argentino, después de que su equipo nunca pudiera aprovechar el hombre demás.
Dos sucesos
fuera de contexto, impropios de la realidad sobre la que transcurría el
partido. Determinantes para el giro decisivo de un encuentro que parecía
acabado. Porque el Manchester City era incapaz, con un jugador más en el campo,
de desordenar al Bayern Munich. Si bien los muniqueses cedieron metros y
terreno en la segunda mitad, los de Pellegrini carecían de creatividad con
balón y no pudieron ocasionar espacios sobre los cuales desequilibrar.
El equipo
conducido por Pep Guardiola demostró estar preparado para las adversidades que
puede plantearle un encuentro de esta competitividad. Si la expulsión de
Benatia en la primera parte parecía condicionarlo, el entrenador movió las
piezas e hizo que su escuadra gestionase de muy buena manera el hombre de menos.
Así, hizo que los ciudadanos jamás pudieran
romper líneas ni encontrar rupturas cerca de la frontal. La intención del City de
pararse en la primera mitad en 4-5-1 sin balón, para recuperar y buscar
inmediatamente la ruptura de Agüero, mutó al tener un hombre más en el campo y adelantar
líneas.
Luego del
fallo del árbitro, que significó el gol de Agüero de penal y la apertura del
marcador, Guardiola determinó el ingreso de Dante por Rode. El joven
centrocampista que actuó en el Eintracht Braunschweig, tras las innumerables
bajas que sufre el equipo en este tramo de la temporada, fue parte de la
medular que también ocupó Hojbjerg. Con la modificación, Pep recompuso la línea
defensiva, y envió la señal a Ribery de abandonar el extremo para comenzar a
jugar por dentro. Franck pasó al lugar que dejó Rode, con el fin de continuar
sacando el balón jugado por carriles interiores. Además, el francés llegó al
área por detrás de Lewandowski, tal como lo hizo ante Roma en el partido disputado en el Allianz Arena.
El
desplazamiento acarrearía ventajas para el conjunto bávaro que, más allá de
disminuir la presión y tener menos fluidez con balón, llegó a la igualdad.
Ribery cedió el balón cerca de la frontal al centro delantero polaco, que
originó una falta con un control soberbio, aún sin tocar la pelota. Xabi Alonso
ejecutó el tiro libre con un tiro rasante al segundo palo. La respuesta de Hart
pudo haber sido mejor, en una acción que el mediocentro español ya había
realizado de forma similar en Bundesliga. Minutos después, antes de finalizar
la primera etapa, el Munich marcó el segundo tanto, tras un muy buen anticipo
del ex delantero del Dortmund entre los centrales.
Dentro del
período que Guardiola lleva como entrenador del equipo alemán, pocas veces se
había observado la postura que tomó para disputar el complemento. A sabiendas
de la inferioridad numérica, replegó y cerró todos los pasillos por los cuales
el City podría haber filtrado un pase. No pudo lanzar un contraataque que cerrara
el partido, pero apostaba por la velocidad y el desequilibrio de Robben, en los
espacios que Lewandowski generaba al caer a banda y arrastrar a Kompany.
La
iniciativa de los británicos en la segunda mitad no se correspondió con claridad
en ataque posicional. Sin Yaya Touré, suspendido por tres jornadas
posteriormente al encuentro ante CSKA Moscú, no tuvo más que lateralizar y
enviar centros. Tampoco disponía de Dzeko, lesionado hace dos fechas en Premier,
por lo que no poseía un efectivo para poder imponerse en el juego aéreo. El
City jugó en campo rival la segunda mitad, aunque no por méritos propios, sino
por la decisión del técnico español de obturar los caminos y no dejar carriles
vacíos.
Boateng
creció en duelos individuales, por momentos se hizo impasable. Asimismo, Xabi
Alonso realizó excelentes movimientos de cobertura ante el compañero que
saltaba por el poseedor de balón, y ayudó en cada marca. Conjuntamente, el
volante guipuzcoano daba salida al Bayern. Ambos futbolistas eran el rostro de
la victoria muniquesa en Manchester. Sin embargo, dos fallos contrastarían con el nivel mostrado en el resto del juego.
Cuando
muchos jugadores visitantes se encontraban por delante de la línea del balón,
una imprecisión de Xabi fue interceptada por Jesús Navas. Agüero tomó el balón
y salió en una carrera muy rápida que finalizó con definición exacta ante la
salida de Neuer. Ya en minutos de descuento, el zaguero alemán se dejó absorber
por la presión del delantero argentino, que sentenció el juego y dio la
victoria a su elenco. Un triunfo vital en las aspiraciones del club de acceder
por segunda vez en la historia a eliminaciones directas de Champions League.
Deberán vencer en Roma en la última jornada.
Nuevamente,
la capacidad de Agüero resultó elemental para los celestes, que poco habían hecho
colectivamente por ganar el partido y seguir con vida en el certamen. Un
pequeño escalón por debajo de aquel gol ante el Queens Park Rangers que
significó la obtención de la Premier League, quedará este hat-trick para los aficionados
citizens. Mientras tanto, el Kun volvió
a exhibir que se encuentra en forma óptima y en plena recuperación de su mejor
nivel.
0 Comentarios..:
Publicar un comentario