Tottenham Hotspur y Manchester United empataron 2-2 por la fecha 13 de la Barclays Premier League en Londres. Sandro y Kyle Walker anotaron por los Spurs, mientras que Wayne Rooney marcó los dos goles de los diablos rojos. Para las aspiraciones de los locales el resultado no es muy bueno, ya que sólo han sacado 3 puntos de los últimos 15 posibles, contando este partido. Para la visita es el doceavo partido sin perder en todas las competiciones, sin embargo, el empate lo aleja del líder Arsenal que ya le lleva 9 puntos.
El partido arrancó enredado. El Tottenham tomó la iniciativa
y en los primeros minutos apareció en las cercanías del arco de David de Gea
sin crear mucho peligro. Por otro lado,
Manchester United hizo lo habitual, abrir las bandas buscando profundidad. Sin
embargo, Walker, por la derecha, y Vertonghen, por la izquierda, controlaron la
llegada de los jugadores rojos que querían ganar la raya para enviar centros que pudieran ser aprovechados por Rooney.
El equipo local encontraró la ventaja, al minuto 17, tras
una jugada donde Paulinho recibió una falta en las cercanías del área. Kyle Walker ejecutó un gran tiro libre que
pasó por debajo de la barrera y que el portero del Manchester United no pudo
controlar.
La anotación abrió el partido y los equipos se acercaron con
más frecuencia, en especial el local que tuvo una llegada clara de Lennon a
pase de Paulinho que atajó De Gea. Sin
embargo en la jugada siguiente llegaría el gol del empate visitante. Phil Jones
recuperó un balón en la salida del Tottenham. El jugador inglés se abrió y tiró
un centro que rebotó en un defensor, el esférico le quedó a Wayne Rooney y éste
aprovechó para enviar el balón al fondo del arco defendido por Hugo Lloris al
minuto 31. El primer tiempo terminó así.
En la segunda mitad, Manchester United salió con un poco más
de ímpetu, pero sin profundidad. Pero pasaron 7 minutos y fue el rival el que
volvió a tomar ventaja con un golazo de media distancia de Sandro. El brasileño enganchó y dejó en el piso a Cleverley cerca al área,
con ello encontró espacio para rematar y metió el balón a todo el ángulo
superior izquierdo de la portería de David De Gea.
Sin embargo, esta alegría sólo duró 4 minutos. El United recuperó un balón atrás y arrancó
una contra. Rooney corrió por la izquierda y filtró un pase a Danny
Welbeck que manejó el balón hasta que el
portero de los Spurs le hizo falta. Rooney, infalible, cobró a la parte central
inferior del arco y empató de nuevo el encuentro.
De ahí en adelante ambos equipos buscaron un tercer gol que
nunca llegó. El partido finalizó y en Londres quedaron muchas dudas de lo que
pasará con André Villas-Boas y su cargo de entrenador de los Spurs. Por el lado de la visita, David Moyes sigue
buscando alternativas a los problemas que tiene su equipo. En el mediocampo ha
logrado encontrar a un Phil Jones que responde frente a la ausencia de Michael
Carrick por lesión. El miércoles, el Tottenham
visitará al Fulham y el Manchester United recibirá en Old Trafford al Everton.
Ambos equipos deben ganar para no perder de vista a los equipos que van en la
cima de la tabla de posiciones.
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