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Para armar la casa, primero hay que poner la base

Southampton y Manchester City terminaron 1-1 en el St. Mary’s Stadium. Sergio Agüero y Daniel Osvaldo los goleadores. Los citizens mostraron falencias en la defensa. Excelente partido de Lallana para el local.



En Southampon se daba un encuentro de técnicos sudamericanos. Mauricio Pochettino contra Manuel Pellegrini. Entre ellos, el ingeniero ha triunfado en ocho de los nueve cotejos; el restante, se igualó.

Pero había algo más importante aún. Manchester City, quién no quería perderle pisada al Arsenal, enfrentaba a un Southampton que quería recuperar la memoria y volver a pelear por los puestos de Europa League. Ambos venían de una seguidilla: los sky-blues de tres victorias; el local de tres derrotas.

El visitante fue el que más se animó al principio. Totalmente apoyado por las subidas de Kolarov y de Zabaleta, con un Yaya Touré, del que ya no sabemos que más elogiarle, un enchufado Negredo y un cooperativo Milner. El desequilibrio total, caía en los pies de Nasri.

Rapidito las redes se inflaron. Sergio Agüero conectó un centro de Kolarov que tres defensores no pudieron sacar del área. Antes de los diez minutos, el chileno ganaba el duelo de técnicos.

Con control y dominio, la visita se relajó y dejó crecer a Lallana, quién hizo pasar una primera parte horrible a Martín Demichelis. Ward-Prowse, Davies y Rodriguez seguían poniendo en apuros a una defensa que merece un párrafo aparte. Para mal de males, tenés a Daniel Osvaldo que dejó enridículo a Kompany, enganchó ante Zabaleta, Demichelis y se la colgó del ánguloa Pantilimon. Golazo, sencillamente.

La dupla de centrales del Manchester City es un desconcierto total. Kompany es la garantía de seguridad, es el que impone el orden, la presencia. Fuerte de arriba en las dos áreas y con habilidad en el mano a mano, considerado defensor de elite. Pero con las lesiones lo obligaron al técnico a probar: Lescott - Nastasic (hoy lesionado también); Lescott – Demichelis; Demichelis – Nastasic; Javi Garcia – Demichelis y así podríamos seguir. Hoy parece con el belga y el argentino, hay una dupla establecida, aunque al segundo central le cuesta más. No tiene ni la capacidad táctica ni la técnica de Kompany, aunque es fuerte vía aérea, pero trata de suplir esas falencias con orden y entrega en el campo de juego.

Osvaldo ya sacó el derechazo goleador

El segundo tiempo pareció una continuación del primero: los quince minutos iniciales fueron todos del Southampton y no solo eso, la imprecisión del City era moneda de curso corriente. Y el ataque de los Santos ponía en apuros a Costel Pantilimon.

La serenidad de los de Pochettino superaba las individualidades del City, que nunca pudieron llegar con claridad al arco de Gazzaniga. Los centros de Ward-Prowse eran lanzas que perforaban una defensa ya mal herida, pero que tuvo la suerte que Rodriguez y Osvaldo nunca acertaron dentro de los tres palos.

¿Del City en ataque? Poco, casi nada. Los ingresos de Navas y Dzeko no pudieron aportar demasiado. Totalmente elogiable la labor de Lovren y de Forke, los centrales santos que colaboraron a esta carencia de ataques.

El 1-1 dejó gusto a poco en Manchester. El Arsenal se aleja y no pudo aprovechar la caída del Chelsea. Problemas en el fondo que generan inconvenientes si no se solucionan a futuro. Por lo pronto, el martes visitará al poderoso Bayern de Pep; un desafío en el cual esa zaga deberá rendir al máximo de sus capacidades, más allá de que la clasificación esté asegurada.

El elenco de Pochettino aprovechó una defensa dubitativa para generar inconvenientes y soñar con que algo más es posible.

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