En la noche parisina mientras se espera por el crudo invierno, el PSG recibió al Lille con el objetivo de aprovechar la sorpresiva derrota del AS Mónaco con el Valenciennes en el día de ayer. Mientras que el Lille de ganar superaba al equipo monegasco en la tabla y se acercaba a sus rivales de hoy.
Los dirigidos por Laurent Blanc no podían contar con Edinson Cavani que tuvo que viajar a Uruguay por temas personales y no logró regresar a tiempo cosa que molestó mucho al campeón del Mundo en 1998. En el primer tiempo la constante fue el ida y vuelta.
Comenzó con un dominio pleno del PSG durante los primeros 10 minutos. Donde el Lille no hacia pie en la cancha. Pero el equipo capitalino no podía transformar esta superioridad en la red. Y como debe ser, fútbol dinámica de lo impensado, la primera jugada clara la tuvo el visitante.
Centro desde la izquierda, en la espalda de Gregory Van der Wiel, de Nolan Roux que no llegó por centímetros el marfileño, Salomon Kalou y la pelota que pasó cerca del palo. Primer sacudón para el arco de Salvatore Sirigu. Pero esto fue, un oasis en un desierto del Lille.
Porque el ataque fue constante por parte del PSG, en gran parte del primer tiempo, a los 22 minutos un centro atrás de Lucas Digne que en velocidad le pegó Ezequiel Lavezzi quien hizo lucir a Vincent Enyeama, aquel arquero nigeriano que le ahogó, más de una vez, el grito de gol a Messi en Sudafrica 2010, en dos oportunidades.
Minutos después llegaría un casi gol de Thiago Silva. El central brasileño conectó abajo del arco un busca pie de Zlatan y la mandó por arriba del travesaño a menos de dos metros de la línea de gol. Y tras esta jugada, apareció él. Ibrahimovic con un tiro libre precioso al palo de Enyeama convirtió el 1-0 para el PSG que en ese momento se escapaba a cinco puntos del Mónaco.
Después de este gol, llegaría un momento clave del partido para que este se haga de ida y vuelta por el resto del encuentro. Una pequeña gresca donde un manotazo de Rio Mavuba a Zlatan Ibrahimovic le tendría que haber significado la roja al mediocampistavisitantepero no fue así.
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| El momento clave, la gresca y la no expulsión de Mavuba |
Y sólo a dos minutos de este hecho, a los 41, Mavuba empató el partido tras un centro raso que ni Kalou ni Roux pudieron tocar. De esta manera terminaba el primer tiempo. Con un 1-1 injusto tras una mala medida del árbitro en no expulsar al capitán del Lille.
En el inicio de la segunda mitad, ni bien empezaba, una falta (discutible) en el borde del área de Digne sobre Franck Béria que el arbitro sancionó con penal. El marfileño, Kalou se hizo cargo de la ejecución y puso el 1-2 en favor de la visita.
Inmerecido hasta el momento, pero el Lille vencía al puntero de la Ligue 1. Con este resultado, Laurent Blanc mandó a la cancha a Javier Pastore y sacó a Alex. Con tres centrales en el fondo, era indudable que el partido sería golpe a golpe. El Lille tuvo sus chances, pocas en relación las que tuvo el PSG, y que no supo aprovechar. Y esto hizo que se cumpla la trillada frase: "Los goles que no se hacen en un arco, se sufren en el otro".
Y así fue. Un corner desde la izquierda donde Enyeama sale muy mal, la pelota sigue de largo y le pega a Thiago Silva, entrando despacio al arco de los dirigidos por René Girard. El 2-2 ya estaba y ahora el único que festejaba era Claudio Ranieri, DT del Mónaco que era el único resultado que le servía para no perderle pisada al PSG.
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| Basa cabecea, mientras Pastore y Matuidi miran asombrados esperando que no sea gol |
Sobre el final, cada uno lo pudo ganar. Primero fue el PSG que con un tiro libre violentísimo de Zlatan al palo del arquero, casi pone el 3-2 y luego fue el Lille que un cabezazo de Marko Basa que terminó en el techo del arco por muy poco no fue gol.
El resultado final fue 2-2 y de esta forma el PSG mantiene la punta, el Mónaco no quedó lejos de ellos y el Lille dejó pasar una gran chance tras estar en ventaja y no saber manejar los tiempos.
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