Los Gunners se quedaron con el Clásico del Norte de Londres; batieron por 1-0 al Tottenham con un gran gol de Olivier Giroud. Un buen primer tiempo de los de Wenger que luego se replegaron y sufrieron en demasía. Debutó Erik Lamela en los Spurs.
Fue blanco de burlas, se lo catalogó de mufa y su juego jamás gustó en demasía en el Emirates. Sin embargo, este arranque de temporada de Aaron Ramsey es para desacar; hoy, volvió a ser clave para un Arsenal que superó de manera justa a un Tottenham que aun no se acomodó.
El galés fue la figura en el Derby del Norte de Londres. Actuó por delante de Wilshere (nuevamente lesionado antes de que finalice el primer tiempo) y al costado de Rosicky, un jugador que está quemando sus últimos cartuchos en el primer nivel.
No es que haya sido el eje del armado de fútbol de los Gunners, básicamente, porque lo mejor de los de Wenger no fue en la construcción paciente y elaborada, sino en las transiciones. Allí, Ramsey fue punzante, ya sea con un pase al vacío o bien con una aparición fulgurante.
En el juego estático, los locales no marcaron mayores diferencias. También es cierto que enfrente tenían un equipo con muchos volantes que se replegaban y esperaban, en ese marco, lo mejor que le podía pasar al Arsenal era robar en el medio y aprovechar las carreras de Walcott, un extremo que vive pasado de revoluciones.
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| El Arsenal se quedó con el Derby más importante de Londres |
En el comienzo parecía que iba a ser el partido de Santi Cazorla; el ex Málaga y Villarreal dispuso de dos tiros libes antes de los 8 minutos: uno fue despejado brillantemente por Hugo Lloris (una de las figuras del match), el otro, que fue por debajo de la barrera, lamió el poste derecho del golero francés.
Muy especulativa la propuesta de André Vilas-Boas. Con el affaire Bale demasiado reciente, los Spurs aún no termianron de conformar el equipo base. De hecho, Erik Lamela (quien ingresó en los últimos 15, en su debut en el fútbol inglés) estaba en el banco y el danés Eriksen acaba de arreglar su llegada.
Pese a esto, podía apostar un poco más el portugués, quien termino disponiendo a Soldado como punta, pero el español carecía de acompañantes, ya que Townsend se fue diluyendo tras un buen comienzo de partido en la banda derecha y Paulinho más que un trequartista es un volante box-to-box. A su vez, los belgas Dembelé y Chadli poco aportaron.
Fue en una de esas recuperaciones en mitad de campo que el Arsenal abrió el marcador; Rosicky jugó al espacio para Walcott quien -habilitado por Dawson- le puso un pase preciso a Olivier Giroud; muchos se lamentan por la falta de un "9" top, hoy el francés definió con toda la categoría del mundo: cachetada con la cara externa del botín zurdo y a festejar.
Promediaba el primer tiempo y el Arsenal tuvo de allí al final del esa etapa inicial lo mejor de su juego; es que era el libreto que mejor le sienta. El Tottenham se adelantó algo pero el dominio situacional pasaba por los locales. Y por Ramsey, una grata aparición (si bien ya estaba, se destapo en el inicio de esta temporada) para Wenger.
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| Giroud ya definió y pone el 1-0 Gunner |
Promediaba el primer tiempo y el Arsenal tuvo de allí al final del esa etapa inicial lo mejor de su juego; es que era el libreto que mejor le sienta. El Tottenham se adelantó algo pero el dominio situacional pasaba por los locales. Y por Ramsey, una grata aparición (si bien ya estaba, se destapo en el inicio de esta temporada) para Wenger.
Pero en el complemento la historia fue diferente. En pocas situaciones pudo correr el Arsenal ya que pocas veces mordió en el centro del campo. Claro, no es lo mismo Flamini que Wilshere y la manera de elaborar esos ataques relampago mutó. Lloris siguió teniendo tapadas de notas altas, pero también Szczesny cobró protagonismo.
Y eso ocurrió por un repliegue masivo de los Gunners. Los cambios delataron las intenciones del alsaciano: adentro Monreal y afuera Rosicky y en el cierre pista para Sagna y banco para Walcott. Con muy poco los Spurs podrían haber empatado, pero entre la fortuna, Giroud en la línea y la pifia de Walker el Arsenal zafó. Más de uno podrá argumentar que era un clásico y que había que dejar el manual de lado, pero la realidad es que esa serie de cambios defensivos amenazaron un triunfo que desde el juego era mucho más claro.
Luego de las dudas tras la derrota ante el Aston Villa en el arranque, los de Wenger se repusieron en Premier, ingresaron a la fase de grupos en Champions y como yapa se anotaron un triunfo en el derby. Si logran cerrar un fichaje importante antes del martes podrán festejar un poco más, pero la sensación final es que aún tienen mucho por mejorar.
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