Ads 468x60px

.

Sufrir, sufrir contigo. Capítulo XIV: Ya nada resulta imposible

El Atlas se salvó del descenso y el suplicio de los hinchas del rojinegro terminó de una vez por todas. Ahora y gracias a un gran torneo se pueden ilusionar con la Liguilla. A seguir soñando que, como decimos siempre, no cuesta nada. 




Se terminó la batalla por la salvación para el Atlas, se acabó por fin el suplicio que nos tuvo en vilo casi un año, un año en el que jamás dejamos de apoyarte, de seguirte y de confiar en ti.

El camino no fue fácil pues estuvo lleno de dificultades, aunque cada jugador de Atlas nos lo fue llenando de alegrías.

Hoy es oportuno decir "gracias" a toda esa gente que encontró la forma de estar aquí y llenarnos de gozo. Hoy podemos presenciar un equipo impetuoso y trabajador, de jugadores entregados que supieron hacer un derroche inteligente de energía y de talento, derroche que ha sido esencial para lograr la tan ansiada salvación.

Hoy nos salvamos y lo hacemos con bastantes motivos para pensar en que se puede trascender. Porque no fue una salvación casual, fue el resultado de la unión de muchas voluntades y capacidades para dejarnos en el lugar al que pertenecemos: La Primera División.

Vuoso y un nuevo festejo
Este Atlas ya no es el mismo, debe ahora reconocer que ha crecido y que está más cerca de lo que le interesa ser, de empezar a competir arriba, de pelear por el campeonato, de convertirse permanentemente en un equipo importante en el país. 

Sintámonos bien, porque por fin lo hemos logrado, porque esta noche nos salvamos y ya nada ni nadie puede cambiar eso.

Ambos equipos se salvaron
El rival para lograr tal hazaña fue San Luis, en circunstancias idénticas a las del Atlas, le bastaba un empate a ambos para certificar su presencia en el máximo circuito, ya que Querétaro perdió el viernes en el Morelos contra Monarcas (con gol de Mancilla, que nos dio una mano, quién lo iba a decir).

Y en el Alfonso Lastras se plantó un San Luis en racha contra un Atlas que se vio inteligente y maduro.

Finalmente fue un emotivo empate a dos que deja a ambos en Primera, con emoción y gol de último minuto para Atlas, para seguir demostrando que estamos fuertes, que vamos a pelear siempre y que no se nos puede dar por muertos.

Una batalla termina y otra empieza, con la unidad, al Atlas se le abren las puertas de la liguilla, en un semestre inolvidable las posibilidades y las ilusiones resultan infinitas. Vamos Atlas, vamos por el campeonato que para ti, ya nada resulta imposible.

Los goles


Otras entregas de Sufrir. sufrir contigo:


0 Comentarios..:

Publicar un comentario