El Inter visitaba a la Fiorentina, pero en el Artemio Franchi sólo hubo un equipo en cancha y ese fue el local, ya que apabulló al "Nerazzurro" con un lapidario 4 a 1.
Los goles fueron convertidos por el serbio Adem Ljajic en dos oportunidades (a los 13 y 65 minutos) y doblete del montenegrino Stevan Jovetic (a los 32 y 54 minutos). Antonio Cassano conseguía el gol del honor para la visita, a los 87 minutos, sólo para decorar el resultado que ya estaba decretado desde hacía rato.
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| Ljajic y Jovetic, los goleadores |
Para los dirigidos por Andrea Stramaccioni era demostrar que podían seguir peleando el campeonato, aún sin su goleador estrella, el veterano Diego Milito, que debido a una rotura de ligamentos se perderá el resto de la temporada (la lesión fue el jueves versus el Cluj, en el partido de ida de los 16vos de final de la Europa League).
Sin embargo el visitante pareció no haber pisado el césped porque no fue ni una sombra de lo que supo ser este equipo a lo largo del torneo. La imagen de su joven y revolucionario entrenador se desdibuja cada vez más y el partido del próximo domingo ante su clásico rival, el Milán, tiene olor a despedida en caso de otra caída estrepitosa como la de hoy.
El Inter había arrancado el campeonato jugando con un 3-4-1-2, pero con hace unas semanas metió un volantazo y pasó a un dibujo táctico más clásico, un 4-3-1-2, con el colombiano Guarín de enlace y Cassano con el "Trenza" Palacio en la delantera.
Por su parte, Vincenzo Montella, hizo al revés que el técnico rival, porque arrancó el campeonato con línea de cuatro en defensa y ahora juega con un 3-5-2 mucho más ofensivo y vertical. No se si tendrá que ver con lo que terminó sucediendo hoy en el campo de juego el cambio de estilo de los entrenadores, lo que sí el resultado es el fiel reflejo de lo producido por ambos en el terreno.
Fue demasiada Fiorentina para un Inter pobre, anémico, sin ideas, como atontado. Parece que le pasó factura el desgaste hecho por la Europa League el jueves y no sólo por la perdida del "Príncipe" Milito, sino también porque se vio un "Neroazzurro" cansado, con poca frescura y que se vio arrollado por su rival, en especial en el mediocampo.
El "Viola" parecía ser consciente que se jugaba la última chance de poder soñar con ingresar a los puestos de Champions League y salió a triturar a su rival. Con un gran trabajo en el mediocampo, le sacó la pelota y con buenos toques en espacios cortos le rompía las líneas a la defensa interista que hacía lo que podía para parar al vendaval violeta.
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| Ljajic fue la figura |
Montella se decidió sobre la hora por el ingreso como titular de Ljajic (le ganó la pulseada a Luca Toni), y vaya si le dió resultado porque el "chico malo" de Firenze anotó dos goles, el primero de cabeza a la espalda de Juan Jesús y el segundo colocándola al palo izquierdo, imposible para el pobre Handanovic que si no estaba en el arco del Inter la goleada podría haber sido más abultada de lo que fue.
Si no hubo más goles es porque lisa y llanamente el conjunto local se apiadó de su rival, luego del 4-0 sacó el pie del acelerador y comenzó a cuidar más la pelota, hacía más teniencia y lastimaba menos, parecía no querer ridiculizar más a un Inter destruído en todo sentido.
La Fiorentina gustó, ganó y goleó, y ahora sueña con clasificar a la Champions League. El Inter por su parte se desdibuja cada vez más en el torneo, parece increíble que este equipo le haya ganado en Turín a la Juventus y que estuvo puntero, hoy a 12 puntos del líder y en el quinto puesto, se aleja cada vez más y la confianza en Stramaccioni empieza a ponerse en discusión en la otra mitad de Milán.
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| Stramaccioni, en la cuerda floja |
Dicen por Italia que si el Inter pierde el clásico de la Maddonnina el próximo domingo podrían darle las hurras a su entrenador, justo ahora que no tiene a su "Príncipe" y el equipo en cancha parece un "mendigo".
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