El Arsenal buscó, buscó y buscó, pero jamás se desesperó y por eso consiguió la victoria frente al Stoke City, que lo único que hizo fue resguardarse atrás. Buenos destellos de sus figuras y un gran nivel colectivo hacen que los Gunners se ilusionen..
Así como el Barcelona no rifa ni cambia su estilo a pesar de
ir perdiendo o de no encontrar la forma de romper con las barreras que le pone
su rival, el Arsenal volvió a demostrar que cuando quiere puede hacer lo mismo
y siempre manteniendo un nivel alto. La
desesperación no le ganó y muchos de sus jugadores mostraron un rendimiento que
puede hacer ilusionar, aunque sin dudas hay que ver si lo sostienen con el
tiempo.
Los Gunners y el Stoke City no se sacaron diferencias en la
primera parte por una sola razón: un primer tiempo estupendo del arquero de la visita Asmir
Begovic. El bosnio le tapó dos pelotas increíbles a Oxlade-Chamberlain,
uno de los niños mimados de CR y quien pareció haber recuperado la memoria,
porque tuvo una buena actuación.
Otros que tuvieron un buen rendimiento fueron Theo Walcott y Diaby, reemplazado en la segunda parte por
Santy Cazorla en lo que fue un enroque de Arsene Wenger para tratar de romper
la igualdad. El punta inglés mostró todo su despliegue cuando arrancó desde
atrás, aunque cuando se acercó al área contraria se nubló y terminó la jugada de
mala manera, después de sacarse de encima hasta a tres rivales.
La segunda parte fue igualita a la primera. El Stoke atrás,
pero bien atrás eh. Todos sus players estuvieron metidos en su terreno de juego
y a lo sumo salieron con algún pelotazo largo para el Fideo Crouch. Eso,
obviamente, le dio más espacios al Arsenal, que se cansó de insistir y de tanto
insistir encontró lo que buscaba: el gol.
Lo extraño es que la conversión llegó de un tiro libre, cual
ni siquiera fue bien ejecutado por Lucas Podolski, ya que alemán quiso hacer lagran Messi o Pirlo, es decir pateó por debajo de la barrera y la pelota en vez
de entrar mansita contra el palo contrario del arquero, rebotó en un rival y
dejó mal parado a Begovic. Hubo una pequeña discusión con el línea, quien al
parecer lo quería anular el tanto pero al final el árbitro, Cris Foy, corrió para el
medio y la alegría reinó en los hinchas del Arsenal.
En los locales hizo su aparición Nacho Monreal, la última
adquisición de los de Londres, mientras que la visita entró, en el segundo período, Michael Owen. Sí, sí el mismo del Liverpool y el Real Madrid, lo nombramos
porque fija que alguno le perdió el rumbo y se habrá preguntado qué era de su
vida.
Fue un triunfo sufrido para el Arsenal, pero triunfo al
final. Tres puntos que le sirven para seguir escalando en la tabla de
posiciones y seguir aspirando a meterse a las copas europeas, algo que seguramente
podrá lograr si mantiene todo lo que mostró hoy y si logra que sus delanteros
se destapen..
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