Paella a la francesa

España, casi sin despeinarse y con perdón por Pepe Reina, venció a Francia por 2-0 y accedió a semifinales de la Euro donde lo espera CR7, en un partido que se jugará el próximo miércoles y desde ahora ya promete mucho.

Parece un chiste de gallegos. España apostó a jugar sin delanteros definidos y con seis mediocampistas: Xavi Hernández, Xabi Alonso, Andrés Iniesta, David Silva y Cesc Fábregas (los tres últimos aparecían en los papeles como los más adelantados). Esta decisión suponía un equipo que buscaría volumen de juego, posesión de pelota, control a ras de suelo y mucho toque corto. Bueno, cuestión -y a esto me refiero con lo de chiste de gallegos- que los muchachos de la paella, si bien mantuvieron el estilo y la idea de siempre, ganaron con un gol de cabeza y otro de penal ambos de Xabi Alonso. 

Ahora si, hablando enserio (no quiere decir que no lo haya hecho en el párrafo anterior), el conjunto de Vicente Del Bosque hizo el partido que le convenía dominó a una Francia que se acordó de jugar cuando promediaba el segunda tiempo. Blanc, entrenador francés, se la jugó por Benzema como único punta y nunca pudo encontrarle la vuelta a la zaga española (Piqué-Ramos).

Iniesta, y me pongo de pie aunque ustedes no me vean, manejó los tiempos de un partido que desde el minuto inicial se supo quien era David y quien Goliat, tuvo en sus pies la distribución de los ataques españoles y contó con la soberbia cobertura de Alonso y Busquets para poder soltarse y hacer sus gambetas que tanto lo caracterizan.

Ni la desesperación de estar a un gol hizo que Francia pueda empatar. Tuvo algunas chances aisladas pero nunca llevó demasiado peligro al arco record de Iker Casillas. El hombre del Real Madrid lleva 780 minutos (13 horas de fútbol) sin recibir un solo gol en los cruces de Eurocopa o Mundial.

Casillas, hombre record

Siempre con las pulsaciones en estado de reposo (?), España necesitaba asegurar el partido, ya que el 1-0 lo había conseguido a los 18 minutos de la etapa inicial y una desatención podía costar caro. Llegó el segundo a los 90 minutos, después de que lo tiren a Pedro en el área y el árbitro marque penal. Xabi Alonso, con un derechazo cruzado, lo cambió por gol y de esa manera pudo ponerle fin a un partido sin sobresaltos para ponerse pensar en la semi del miercoles y ubicar a Cristiano entre ceja y ceja.

el segundo gol de España