A posteriori de la Guerra Civil que azotó a Ucrania, el Shaktar se asentó en Lviv. Lucescu, en su noveno año al frente del equipo, continua optando por futbolistas brasileños y busca seguir sumando éxitos.
Donetsk, una de las
ciudades ubicadas al este de Ucrania, y donde habita una de las instituciones
más importantes del país, el Shakhtar, padeció en el 2014 una brutal guerra
contra los separatistas pro rusos que ocuparon gran parte de la metrópoli, con
la excusa de anexarla, junto a Lugansk, al territorio ruso.
Los constantes
bombardeos provocaron enormes pérdidas tanto económicas como humanas, por ello
es que seis jugadores extranjeros que formaban parte del plantel –cinco
brasileños y el argentino Facundo Ferreyra- no quisieron regresar al lugar
hasta que no cesara el fuego, y permanecieron en Francia luego de un partido
entre los topos y el Olympique de Lyon. Las
autoridades de la institución amenazaron con no cumplir con sus contratos de
persistir esa actitud y, al poco tiempo, sin más remedio, volvieron. El único
que corrió con suerte fue el Chuky,
quien fue cedido al Newcastle inglés.
Como si fuera poco,
el 22 de agosto de 2014, Sergei Palkin, director ejecutivo del club, reconoció
que el estadio Donbass, donde el Shakhtar oficiaba de local, había sido
bombardeado por los rebeldes. Dañaron la estructura del complejo y una
subestación eléctrica, y como consecuencia debieron mudarse a la ciudad de
Lviv, al oeste de Kiev, para disputar los partidos como local tanto en el torneo
doméstico como en Champions. Fueron momentos complicados los que atravesó la
Liga ucraniana, ya que hubo varios equipos de la zona este que decidieron
participar de la liga de fútbol rusa y, además, los partidos finales se jugaron
a puertas cerradas.
Sin embargo, estos
conflictos bélicos no impiden mencionar las grandes campañas obtenidas por el
conjunto que dirige el rumano Mircea Lucescu. En mayo de 2004, Lucescu arribó a
Donetsk procedente del Besiktas de Turquía para hacerse cargo del equipo
y al primer año ya obtuvo la liga local. En 2008, el Shakhtar consiguió la
triple corona por primera vez en su historia, al ganar la Premier League, la
Copa y la Supercopa ucraniana. Luego repetiría esta misma hazaña en 2012 y
2013. Pero sin dudas el mayor éxito del rumano fue el logro de la Copa de la
UEFA (actual Europa League) en la temporada 2008-09: luego de finalizar tercero
en el grupo de Champions, los topos accedieron al segundo certamen en
importancia de clubes de Europa, y en la final vencieron al Werder Bremen por 2-1 con un gol del brasileño Jadson en la prórroga. En total, Lucescu consiguió
nada menos que 21 títulos con el Shakhtar.
Otro de los puntos
importantes de este excéntrico entrenador rumano es que en sus filas siempre
contó con una gran cantidad de jugadores de nacionalidad brasileña. Es muy
común ver un partido del Shakhtar y notar que la gran mayoría de los
futbolistas son oriundos del país ganador de cinco mundiales. De hecho, en la
pasada temporada la mitad de los jugadores eran de Brasil, y en varios cotejos
llegaron a jugar nueve brasileños de once titulares.
Mircea Lucescu es un
gran admirador de los futbolistas cariocas: mientras realizaba una gira en 1968
como jugador del Dínamo de Bucarest en el Congo, fue citado para la selección
mayor rumana que se encontraba en Brasil, y desde aquel momento se enamoró de
sus características futbolísticas, entre otras cosas. “Allí descubrí el fútbol,
la samba, las playas y el sexo”, reconoció el hombre de 70 años, quien admitió conocer
el país de sur a norte, “desde Porto Alegre a Fortaleza”.
Ya asentado en Lviv,
ciudad donde está ubicada la institución luego de la anexión de Donetsk a
Rusia, Lucescu y sus dirigidos buscan continuar con los éxitos que los
caracterizaron durante más de una década. Marcha segundo en la Premier
ucraniana a tres puntos del Dínamo de Kiev con diez partidos jugados. Sin
embargo, el presente en Champions League no es para nada auspicioso: participa
del Grupo A junto con el Real Madrid, el PSG y el Malmo sueco. En sus primeras
dos presentaciones, cayó 4-0 como visitante ante el Real y luego como local
0-3 frente al PSG. Aún quedan cuatro partidos por disputarse, y el objetivo
principal es acceder a la Europa League, ya que tanto el Madrid como el París Saint
Germain pican en punta para clasificar a octavos.
0 Comentarios..:
Publicar un comentario