La Eliminatoria volvió a dejar severas dudas a nivel colectivo, pero el talento individual convierte a los marfileños en favorito a llegar a las últimas instancias del certamen.
Los Elefantes comienzan a quemar los últimos cartuchos de una generación llena de cualidades en busca del resultado resonante que siempre prometió y nunca consiguió. Sin soldados de la categoría de Didier Zokora y Didier Drogba, que informaron su salida definitiva del seleccionado tras la última Copa del Mundo, la responsabilidad de llevar las riendas del conjunto dirigido por Hervé Renard recaen en el fantástico Yayá Touré, quién será secundado en la búsqueda del postergado título continental por hombres como Wilfried Bony, Serge Aurier, Gervinho o Cheik Tioté.
Los Elefantes comienzan a quemar los últimos cartuchos de una generación llena de cualidades en busca del resultado resonante que siempre prometió y nunca consiguió. Sin soldados de la categoría de Didier Zokora y Didier Drogba, que informaron su salida definitiva del seleccionado tras la última Copa del Mundo, la responsabilidad de llevar las riendas del conjunto dirigido por Hervé Renard recaen en el fantástico Yayá Touré, quién será secundado en la búsqueda del postergado título continental por hombres como Wilfried Bony, Serge Aurier, Gervinho o Cheik Tioté.
Historia
Costa de Marfil es un habitual participante de la Copa Africana
de Naciones desde mediados de los años 80. Tras tres participaciones correctas
y consecutivas entre 1965 y 1970, los ‘Elefantes’ debieron esperar hasta 1984,
cuando organizó la competencia, para regresar al máximo certamen continental de
selecciones, pero desde allí a la
actualidad solo faltó a una edición
(Túnez 2004), obteniendo el único título de campeón en Senegal 1992 tras
derrotar a Ghana en una larga tanda de penales luego de igualar sin goles durante
los 120 minutos de juego.
Sin embargo, la última década llevó a Costa de Marfil a la
consideración del primer mundo futbolístico con una serie de jugadores de gran
talento que llevaron al seleccionado naranja a las únicas tres presentaciones
en Copas del Mundo en Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014.
Pero los resultados obtenidos no cumplieron con las
expectativas y nunca superaron la fase inicial de la Copa del Mundo además de
fallar en los sucesivos intentos por obtener la Copa Africana de Naciones, perdiendo incluso en la final de Egipto
2006 ante el local por penales y en Gabón-Guinea Ecuatorial 2012 por la misma
vía ante Zambia luego de un demoledor recorrido a lo largo del torneo que lo
consagró subcampeón con la valla invicta habiendo ganado todos los partidos
menos la final.
El Camino a la Copa
Su clasificación pendió de un hilo tras la sorpresiva
derrota como local ante República Democrática del Congo por 4-3, pero Camerún
le dio una mano grande derrotando a los ‘Leopardos’ en Yaoundé y protagonizando
un verdadero papelón en el enfrentamiento entre ambos en Abidjan que terminó
con un ‘solidario’ empate en cero que clasificó a ambos y dejó a los congoleños
a la deriva de los números para dirimir el ingreso como mejor tercero que
finalmente consiguió. Los once goles recibidos en seis enfrentamientos
eliminatorios hacen ruido en el futuro del conjunto de Renard.
- Costa de Marfil 2-1 Sierra Leona (Doumbia y Gervinho)
- Camerún 4-1 Costa de Marfil (Yaya Touré)
- República Democrática del Congo 1-2 Costa de Marfil (Bony y Gradel)
- Costa de Marfil 3-4 República Democrática del Congo (Yaya Touré y Kalou 2)
- Sierra Leona 1-5 Costa de Marfil (Kolo Touré, Kalou 2, Gradel y Gervinho)
- Costa de Marfil 0-0 Camerún
Posiciones: Camerún
14; Costa de Marfil 10; República Democrática del Congo 9 y Sierra Leona 1.
El Juego
Luego de una Copa del Mundo donde la mezquindad de Sabri
Lamouchi terminó jugando en contra de un equipo más preparado para atacar,
Hervé Renard le trata de dar un aire más ofensivo a los ‘Elefantes’ con un 4-2-1-3 más arriesgado. Aún a mitad de camino
en el proceso de reforma colectiva del equipo, la respuesta no es la más
favorable y sólo se encienden las luces de la esperanza cuando Yayá Touré se
encarga de dar luz al ataque marfileño o cuando los metros libres le entregan a
Gervinho la posibilidad de realizar un slalom hacia la portería rival.
Al mismo tiempo, la defensa no entrega grandes garantías y el equipo sufre
en la zona de salida obligando a Touré a retroceder varios metros ante la
impericia de sus compañeros más habituados a la marca que al juego, encabezados
por Cheick Tioté, el mediocampista de Newcastle United de Inglaterra.
De este modo, el equipo termina dividiendo el balón o bien
pierde mucho tiempo enhebrando la salida de su campo, le quita posibilidades
creativas a Touré en un espacio más útil y encierra con su lentitud a sus
delanteros entre una maraña de camisetas rivales llevando al terreno del duelo
individual sus mayores probabilidades de éxito en la generación de peligro.
La situación cambia notablemente cuando Touré toma el balón
en campo rival y puede abastecer a Max Gradel, Wilfried Bony, Gervinho o el
propio Salomón Kalou cuando ingresa desde el banco de suplentes. El hombre de Manchester
City no solo genera por si mismo mucho peligro con su manejo y su pegada sino
que explota las mejores cualidades de sus compañeros y permite con su
inconfundible administración de los tiempos de juego en cada sector del campo,
la llegada de mayor cantidad de gente a
terreno adversario.
Aún el talento individual sigue pesando más que el funcionamiento colectivo y aunque junto a
Camerún son los favoritos para avanzar de ronda desde el Grupo D de la Copa
Africana de Naciones, podrían sufrir más de la cuenta si el juego de conjunto no
aparece y las individualidades tampoco.
Fixture
20-1 –vs- Guinea
24-1 –vs- Mali
28-1 –vs- Camerún
El Entrenador
Hervé Renard
Aix-les-Bains, una pequeña comuna del sureste de Francia, vio nacer hace 46 años a este ex defensor convertido en entrenador profesional
en 1999 cuando tomó las riendas de SC
Draguignan del fútbol regional de su país natal. Tras un paso por China como
asistente de Claude Le Roy, hoy entrenador de Congo, Renard pasó por el ascenso
inglés para dirigir a Cambridge United, donde también contó con el consejo de Le
Roy en 2004 para regresar al fútbol de
ascenso francés como entrenador de AS Cherbourg antes de iniciar su carrera a
nivel de selecciones.
En 2007, tras un corto paso por Ghana, nuevamente asistiendo
a Le Roy, Renard tendría el primer gran desafío de su carrera en su primera
estadía en Zambia donde cinco años después, ya en su segundo proceso,
conseguiría la hazaña de llevar al
título continental a ‘Las balas’ contra todo pronóstico, tras derrotar
sorpresivamente al seleccionado que hoy tiene al frente, Costa de Marfil. Su
carrera también registra un paso por el seleccionado de Angola y procesos poco
exitosos en USM Alger de Argelia y Sochaux
de Francia, donde descendió en la temporada pasada.
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