En uno de los partidos más atractivos que presentaba la octava jornada de la Premier League, los comandados por Manuel Pellegrini superó como local a los Spurs por 4 a 1 en un partido que tuvo realmente de todo. Sergio Agüero, con cuatro goles, fue la figura excluyente del encuentro.
El equipo del chileno, debido a que entre semana tiene compromiso por Champions League, salió al campo con un par de modificaciones en lo que es un once habitual: Lampard -quien luego se fue lesionado- y Fernando en el doble pivot por Fernandinho y Toure Yaya fueron la variante más novedosa en el local. De todas maneras la calidad, tanto de los titulares como de los suplentes, es enorme en este equipo.
Los de Pochettino, por su parte, visitaron la ciudad de Manchester con el objetivo de eliminar los fantasmas aún vigentes de la temporada pasada, cuando fueron superados por el City por un humillante 6 a 0. El técnico argentino puso en cancha un 4-2-3-1, en donde se destacó el debut como titular en Premier del defensor ex Ferro y Sevilla, Federico Fazio.
El desarrollo del juego, durante casi toda la primera etapa, fue como marcan los libros de la Liga Inglesa: dinámica, velocidad, equipos con propuestas ofensivas y ambiciosas. El local fue el que impuso los tiempos del partido, manejaba más y mejor la pelota, y jugaba más tiempo en campo rival. Con sus temibles triangulaciones por los costados, ya sea por izquierda entre Milner-Clichy-Silva, por derecha con Navas-Sagna y de nuevo el español, más las constantes diagonales al espacio que realizaba Agüero, el City marcó su superioridad. Tottenham, que prefirió no exponerse atrás, ejerció su presión a la altura del doble pivot rival, y buscó, tras recuperar la pelota, verticalidad: transiciones rápidas para aprovechar los huecos que quedaban en la defensa rival, principalmente por los costados.
Así fue que a los 12 minutos, Aguero recibió dentro del área rival, muy congestionada. Hizo una pausa, enganchó para su pierna más hábil, y sacó un muy buen remate que se clavó en el segundo palo de Lloris, quien nada pudo hacer. Pero enseguida, tras una pérdida en campo propio de Fernando, algo nervioso en esos primeros minutos, provocó que Eriksen, tras pase previo de Soldado, defina sólo frente a Hart para estampar el 1 a 1.
El City siguió buscando, y la recompensa llegó: a los 20, luego una falta que sólo el árbitro vio de Lamela sobre Lampard dentro del área, otra vez el Kun, con un tiro cruzado, puso a su equipo en ventaja. Pero esto no era todo: a los 31 el juez, esta vez si en una decisión acertada, volvió a darle otro penal al local, aunque en esta oportunidad, primero culpa de la tapada de Lloris y después por la mala ejecución de la volea en el rebote, que se perdió por encima del travesaño, Agüero no pudo festejar, y de esa manera concluyó una emocionante primera parte.
El segundo tiempo siguió con el mismo vértico e intensidad, el partido se tornó de ida y vuelta y lleno de jugadas de gol. Primero lo tuvo la visita de penal: Demichelis agarró a Soldado fuera del área y el árbitro, para completar su jornada fatídica, sancionó la pena máxima. Pero el delantero español, más allá de la buena ejecución, no pudo vulnerar a Hart, otro de los puntos altos del equipo del Ingeniero.
El partido estuvo para los dos, tanto como para el empate de los Spurs como para la ampliación de la ventaja de los Ciudadanos, pero hubo una jugada que terminó con esa incertidumbre: a los 70 Navas, desde el costado derecho, buscó a Agüero con un pase a espaldas de los centrales. Fazio, al ver que su compatriota iba a conectar con el balón, decidió agarrarlo, lo que provocó lo caída del Kun. El árbitro, una vez más, cobró penal y expulsó al defensor argentino. Esto significó que el ex Independiente, de enorme partido, canjeara la pena máxima por gol, lo que también dio por terminada la intención del Tottenham por empatar el partido. Pochettino decidió rearmar la defensa antes que arriesgar a ir en busca de la remontada, y puso a Vertonghen por Mason.
El partido bajó en dinámica y el City comenzó a hacer circular la pelota con mas paciencia, en gran parte debido a la poca resistencia que presentaba el rival, refugiado en campo propio. Pero faltaría algo más: el Kun controló la pelota dentro del área por izquierda, se acomodó para la zurda ante la marca del ingresado Vertonghen, y sacó un preciso remate que se coló en el palo más alejado del arquero, para cerrar un partido redondo, tanto de él como de su equipo. Fue 4 a 1 para los locales, que llegan así a los 17 puntos y se mantienen expectantes. Los dirigidos por Mauricio Pochettino, que en la semana jugarán por Europa League, se mantienen con 11 puntos y se alejan de la pelea.
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