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A sol y sombra

La imagen de la lesión del Luis Montes ya recorrió el mundo, pero detrás de esto hay un jugador que quedará afuera del Mundial a pesar de su esfuerzo. El destino, la mala suerte o simplemente una casualidad dejan a su ilusión por el piso.


Minuto 47. Luis Montes pasa al lado de la grada con rumbo del hospital, lleva una toalla que le cubre el rostro y las manos en la cabeza como señalando su dolor, pero aún más su incredulidad. La tibia y el peroné de su pierna derecha están rotos y el Mundial de Brasil es más lejano que nunca para el número 20 de la Selección Mexicana. El sueño de vestir la camiseta nacional en una Copa del Mundo por primera vez se le diluyó a sus 28 años.

Minuto 35. Un guerrero yace en el pasto, apenas su cuerpo chocó contra el suelo su gallardía le permitió asomarse a su pierna para conocer la gravedad del golpe. Un sonoro ¡No! salió de su boca como en búsqueda de una respuesta a tan mal momento… el dolor se le transformó en lágrimas y las lágrimas en impotencia.

Dolor
Minuto 34. El Chapo merodea nuevamente el área ecuatoriana, tiene el control del balón y busca como volver a hacer daño, de repente la pelota se le alarga y, como en toda su carrera, tiene que ir a buscarla con determinación y coraje; traba fuerte en busca del balón y se encuentra con la poderosa pierna de Segundo Castillo que lo recibe estoico, bien plantado. La fortaleza del morenazo se enfrentó al ímpetu del mediocampista mexicano y entonces ese choque de fuerzas, de esperanzas y de ilusiones provoca que ambos se rompan, uno la tibia y el peroné, otro los ligamentos de la rodilla. Los dos caen y la desgracia se levanta en medio de ambos.

Adiós Brasil
Minuto 33. México, dominado durante los primeros diez minutos de juego, busca retomar el control de la media cancha, pero por momentos parece demasiado solo Héctor Herrera. El eterno capitán Rafael Márquez, gladiador de mil batallas que le facultan para leer el juego y entender dónde debe posicionarse, sale a buscar un balón cerca del mediocampo y extiende su despliegue buscando a su referencia de ataque. Oribe Peralta recibe de espaldas y tan sapiente como siempre, cede atrás para que la figura de Montes se magnifique cuando con un zurdazo digno de su talento, inaugura el marcador en este partido de preparación. 1-0, que golazo del chihuahuense, que da muestras de su clase cada vez que sale a la cancha. Si el juego de México puede trascender en tierras cariocas, mucha responsabilidad recae sobre este genial jugador que ya brilló en una cancha brasileña cuando su equipo: el León, derrotó al Flamengo y se posicionó entre los dieciséis mejores del continente.

Júbilo
Previo a saltar a la cancha: Por la mente del bajito y talentoso jugador de “La Fiera” deben pasar los momentos en que la afición del Pachuca le menospreció por ser de casa, las dificultades y penurias de deambular por la Liga de Ascenso con el León, cuando él se consideraba jugador de Primera División. Seguramente las palabras de Gustavo Matosas vinieron a su mente, cuando nadie más que él creyó en su talento y le otorgó la 10 del equipo esmeralda y que, tres años después de recibirla; lo tenían luchando por la posibilidad real de iniciar el Campeonato del Mundo como titular con la Selección Nacional, con el ascenso a primera como bagaje y con un Bicampeonato de Primera División con el equipo del Bajío. En tres años pasó de viajar en autobús cuando iban de visitantes. A hipotético titular rumbo al mundial. En el Chapo Montes todo es ilusión, al lado de su gran amigo y compañero de travesía: “Gullit” Peña, Montes toma su lugar, sonríe y le da la mano al pequeño que lo acompañará rumbo a la cancha. El chapo comienza a avanzar, para demostrarle a Miguel Herrera que él puede con el peso del Equipo Nacional.

Sábado 31 de mayo del 2014: Hoy México juega un amistoso de preparación ante la siempre complicada selección ecuatoriana, hay lugares en el once titular que todavía no quedan definidos, y el Piojo Herrera espera disipar sus dudas.

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