En su estadio, el Catania venció 3-1 a la Lazio. Jugó un gran partido,
con mucha solidaridad y muy buen trabajo en todas las líneas. Los tres goles
locales fueron argentinos.
El
compromiso y la seriedad. La actitud de un equipo apremiado en la parte baja de
la tabla del Calcio por las probabilidades del descenso a la Serie B. Esos
aspectos resaltan desde hace tres semanas en el Catania, que viene demostrando
un buen nivel de juego en los partidos recientes. El colectivo parece haber
tomado conciencia de la situación y sacaron a relucir su juego e intensidad. Lo
que la temporada le reclamaba, y este domingo llegó su punto más alto.
Recibiendo
a la Lazio en el primer turno en Italia, el Catania respondió con creces a un
duro desafío. Continuó con esa evolución en el rendimiento que viene exhibiendo
desde hace algunos partidos. Pero esta vez la realidad dice que el nivel
resultó aún mayor. Además, desde un primer momento las convicciones se vieron
con más fuerza cuando la legión argentina empezó a crecer en la cancha.
Fueron
exactamente nueve argentinos titulares en el dueño de casa. Y resultaron
fundamentales. Desde un primer momento. Porque antes de que se cumpla el minuto
de juego, el Catania ya se había puesto en ventaja. La intensidad ponderó de
principio a fin en el desarrollo de los 90 minutos. A los 40 segundos, movieron
la pelota de una banda a la otra con una buena triangulación, y desde la
izquierda Castro tiró un buen centro para que Izco aparezca por el segundo palo
y coloque el primer gol de partido con un derechazo de aire y con efecto.
Golazo para empezar un partido que en la previa no se notaba como accesible.
Izco llegó por el segundo palo y metió el primero de aire |
Lo mejor
del local fue que no bajó el ímpetu, la fuerza de ir por otro gol. Tuvo oportunidades
para aumentar la ventaja, aunque no lo logró y decidió retrasarse unos metros.
Allí fue que Lazio, en el último cuarto de hora del primer tiempo, encontró
posesiones largas, pero no se le cayó una idea de juego. En la mitad de cancha,
Biglia debía salir mucho del centro para ocupar los espacios que dejaban sus
compañeros. Klose estaba muy lejos del arco y sus movimientos de pivote no
influían. De todas maneras, después de tirar centros intrascendentes, en uno
Mauri apareció solo y colocó la igualdad. Parecía un gol clave, al cierre de la
etapa inicial, pero finalmente no sería más que eso.
Al segundo
tiempo, los dirigidos por Rolando Maran saldrían con esa intensidad que habían
perdido con el paso de los minutos. La pegada de Lodi volvió a ser vital, y en
el arranque del complemento el Catania volvió a ponerse en ventaja. Centro del
volante con su excelsa zurda, se elevó Spolli sacándose la marca de encima y
cabeceó de forma impecable. Otro gol argentino, y nuevamente arriba el local,
que salió a jugar con el mismo espíritu que en la primera mitad, con el
compromiso que su actualidad le reclama.
Luego
llegaría otro gol de la misma nacionalidad. Gino Peruzzi, que hizo un gran
partido por el costado derecho, recibió en zona interior en la mitad de cancha
tras la gestación por la izquierda. Comenzó su carrera desde allí, acercándose
al arco abrió a un lado y fue al área chica a buscar la devolución; cuando le
llegó, conectó a la red. Una muy buena conquista del ex lateral de Vélez, que
también controló a Lulic por la banda, en lo que es una de las principales armas
del conjunto capitalino.
Los
movimientos ofensivos de los romanos, tal como sucedió en el derbi la semana
pasada, o ante la Juventus hace casi un mes, fueron muy repetitivos. Faltaron
variantes. Casi siempre hay recepciones por los costados, aunque faltan
desdobles de los laterales. Sin Hernanes falta creación. Frecuentemente la jugada deriva en un centro a
Klose, hoy absorbido por los centrales locales (solo tuvo una de cabeza, pasó
al lado del palo, a los 91’). Todo se hace muy previsible.
Por su
lado, el Catania tuvo un partido a placer. Jugó como el contexto le pedía, y
con la convicción de salir y hacerlo bien. La situación lo ameritaba y al
equipo semi argentino le salieron a la perfección las cosas. Todos tuvieron un
buen rendimiento, incluso Andújar, que respondió cuando lo llamaron y tuvo muy
buenas salidas. Un compromiso que se mantiene desde que comenzó febrero. Deberá
mantenerlo. Enfrente tuvo a un rival muy deslucido.
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