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La paridad y la incertidumbre

Los grupos G y H terminaron conformados de maneras bien diferentes. Mientras que para muchos la zona que encabeza Alemania es la más dura y competitiva del certamen, la que tiene a Bélgica como primer preclasificado parece un poco más débil. 


Dos realidades bien diferentes arrojó el sorteo del Mundial para los grupos G y H, cuyos clasificados se cruzarán en los octavos de final. La exigencia de la zona que cuenta con Alemania, Ghana, Portugal y Estados Unidos parece a priori la que conjuga mayor paridad y exigencia en todo el Mundial. En tanto que Bélgica, Rusia, Argelia y Corea del Sur conforman un grupo en el cual les Diables Rouxes han salido muy bien parados. Vamos al análisis más pormenorizado.

Alemania, una luz de ventaja pero sin margen para descuidarse

EL equipo de Joachim Löw es uno de los grandes candidatos a quedarse con la Copa del Mundo. Sin embargo, ese peso ya lo han arrastrado en otras citas recientemente -en especial en la última Euro- pero no han podido quedarse con título alguno; todos ellos fueron para España. El gran momento del Bayern Münich y el Borussia Dortmund acrecienta la ilusión en las filas de la Mannschaft, pero el sorteo no fue todo lo halagüeño que podría haber sido para los tricampeones del Mundo.

No solo porque Ghana, Portugal y Estados Unidos son rivales difíciles, sino también por la región en la que disputarán los partidos. Salvador, Fortaleza y Recife, todos ellos en el temido Nordeste. Lusitanos, africanos y norteamericanos en los nada generosos horarios de 13, 16 y 13 horas. El desgaste va a ser un factor a tener en cuenta en la copa del Mundo. 

La primera jornada, el 16 de junio, deparará los juegos entre Alemania y Portugal y Ghana ante Estados Unidos. El antecedente entre europeos en Copas del Mundo data del Mundial 2006: en el choque por el tercer puesto, los lusos vencieron a Alemania y le arrebataron el lugar en el podio. En tanto que ghaneses y norteamericanos se midieron en el último juego del Grupo E y los africanos ganaron 2-1 adquiriendo el pase a octavos de final en su primera participación. 


El duelo Boateng

En la segunda ronda, con matchs el 21 y el 22, Alemania se medirá ante Ghana, al igual que en el Mundial pasado. Mediáticamente, el duelo entre los hermanos Boateng probablemente sea lo más llamativo. En Sudáfrica, los europeos ganaron con ese choque y se quedaron con el primer lugar de la zona. En tanto, Portugal y Estados Unidos tienen un antecedente en el 2002: allí EEUU ganó 3-2 en el primer juego de la zona. Los estadounidenses realizarían una gran copa, cayendo en cuartos de final, mientras que los lusos no pasaron la fase de grupos. 

El cierre será el 26 de junio con un dato a tener en cuenta: Portugal y Ghana tendrán un desplazamiento largo hasta Brasilia. En tanto que Alemania y Estados Unidos se cruzarán en Recife. El morbo estará dado por el cruce entre el equipo germano y su ex DT: Jürgen Klinsmann. El ex delantero sembró la semilla junto con Löw, cuando este era su ayudante en la Copa del 2006. Muchos de los frutos que hoy se recogen comenzaron a trabajarse con Klinsmann en el banco alemán. Los alemanes batieron en cuartos de final del Mundial 2002 a Estados Unidos por 1-0. 

Cristiano Ronaldo y la dura tarea de liderar a un equipo que no arrancó en todas las Eliminatorias. El ballet alemán con Ozil, Reus, Götze, Hummels, Gündogan y Schweinsteiger. La potencia de Ghana que apabulló a Egipto y con Boateng, Assamoah, Essien y la prometedora camada que hizo un buen Mundial Sub 20 quieren superar los cuartos de final del 2010. La constante evolución de los norteamericanos que ya han dejado de ser participantes de ocasión. El Grupo G, paridad y exigencia.  

Bélgica y un sorteo que le sonrió

La prometedora generación belga tendrá un gran desafío por delante: regresar a un Mundial luego de 12 años y responder a las enormes (y tal vez exageradas) expectativas que se depositaron en Les Diables Rouxes. No es que con esto quiera decir que Bélgica no tiene ese potencial del que todos hablan, pero no deja de ser un grupo de jugadores que aún no tuvo una gran cita; es más, ni siquiera ha ido a la última Euro. 

El último amistoso ante Colombia (triunfo 2-0 de los de Pekerman) ha sembrado algunas dudas, aunque siendo justos, Wilmots planteó pruebas puntuales. De todas maneras, como indicó Cristian Franco en CR, Bélgica aún no es un equipo que maneje todos los registros de un candidato serio. 

Pese a esto, el Ranking FIFA le posibilitó ser cabeza de serie y el sorteo le deparó una zona, en principio, accesible. Rusia es un tapado -ganó el grupo sobre Portugal-, Corea es competitiva pero no parece superior a lo que era en el 2010 cuando tenía a un Park en plenitud (hoy retirado de la Selección) y Argelia entró por la ventana aunque posea más talento que hace cuatro años.

Hazard, Lukaku y compañía deberán hacerse cargo de las altísimas expectativas que generó el equipo en los últimos dos años, desde la llegada de Wilmots. El ex volante logró encausar el enorme talento del equipo y terminaron realizando una fase eliminatoria sensacional, dejando atrás a rivales fuertes como Croacia y Serbia y a los británicos Gales y Escocia. 

Flamencos y balones cuentan con atecedentes ante Rusia. En el último mundial del que participaron, los belgas accedieron a octavos de final (donde caerían en un polémico juego ante Brasil). Para eso debieron superar en el juego decisivo de la zona a los dirigidos por Oleg Romatsev. Fue 3-2 y precisamente Wilmots anotó el tercer tanto de su combinado. 

También los cabezas de serie registran choques ante Corea del Sur. El primero data de Francia 1998, cuando no lograron pasar la fase de clasificación ninguno de los equipos. En el Parque de los Príncipes empataron 1-1 y con el angusitoso empate mexicano, vía Pájaro Hernández, los belgas se fueron rápidamente eliminados. El segundo se dio en Italia 90; en aquella ocasión, en Verona, los europeos triunfaron por 2-0.

Más allá de Bélgica y de los antecedentes (los otros equipos no registran cruces por Copa del Mundo entre sí), es interesante focalizar en Rusia. Pese a liderar en su grupo, no muchos hablan del equipo dirigido por Fabio Capello (extendió su vinculo hasta 2018), a pesar de haber enviado a Portugal a jugar el repechaje. Con una liga mucho más fuerte que hace unos años, y la base del equipo semifinalista de la Euro del 2008 -contando además con una figura en ascenso como Dzagoev-, los rusos están en condiciones de pelear por el liderato de la zona. 


Dzagoev, una de las figuras de Rusia

Para Corea, que en el pasado Mundial alcanzó los octavos de final y cayó ante Uruguay, y Argelia, la zona se presenta algo más difícil. Los asiáticos llegaron al Mundial por goles a favor, superando a Uzbekistán pese a tener la misma cantidad de puntos. Irán fue el líder de esa zona. Son Heung-Min, el delantero del Bayer Leverkusen, aparece como una de las figuras en un plantel que cuenta con muchos jugadores que actúan en la liga doméstica, una de las más fuertes del continente. 

Por último, Argelia. Bougherra y su gol metieron a los Zorros del Desierto en una nueva Copa del Mundo, la segunda al hilo. En esta oportunidad, el equipo parece beneficiarse con jóvenes prometedores, en la comparación con el 2010. Taider y Belfodil del Inter, Feghouli del Valencia, o Lacen del Granada marcan que el nivel del conjunto del Magreb creció. Cuentan con más opciones que hace cuatro años pero así y todo van de punto. Repetir los dos triunfos de 1982 (ante Alemania Federal y Chile) sería un hito. 

En cuanto a los traslados, esta zona tiene algunas ventajas, como la F, la de Argentina. Corea del Sur que jugará en Cuiabá (en el Mato Grosso) y Porto Alegre (Río Grande do Sul) es la que más distancia deberá recorrer, aunque no serán distancias descomunales. Sí la sede de Cuiabá donde se dará Rusia-Corea es una de las temidas, por el calor y la humedad de la ciudad. 

Los cruces

Esto es pura especulación, pero bueno, hacia allá vamos. Considerando que Alemania aparece como el candidato a ganar la zona G, los teutones se medirían en este eventual choque de octavos ante el segundo de la zona H. Ese juego sería en Porto Alegre: el que gane la zona G tendrá un largo viaje desde el Nordeste. Quedaría del lado de la llave del ganador del grupo A (potencial choque en semifinales) y el juego de cuartos lo cruzaría ante el vencedor del líder de la zona E (grupo de Suiza, Francia, Ecuador y Honduras) y el segundo de la F (Argentina, Bosnia, Nigeria e Irán). 

Por otra parte, el líder de la H -una zona también difícil de pronosticar- quedará del otro lado del cuadro. Se alternan los rivales aunque el orden de cruces sería similar.

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