Arsenal venció 3-1 al Manchester
City con goles de Walcott, Ramsey y Giroud en un amistoso jugado en Helsinki.
El City de Pellegrini mostró una nueva cara, aunque quien golpeó fue el equipo
londinense.
Con una línea de cuatro característica, un doble cinco entre Fernandinho y Toure, Silva armando desde la banda izquierda y Dzeko y Negredo en la delantera, el Manchester City salió a proponer. Pellegrini buscó quitarle la posesión de balón al Arsenal y dominar posicionalmente con Fernandinho y Toure. Silva jugó suelto, y con el constante movimiento del bosnio y el español en la delantera.
El once de Wenger es ya muy
conocido, lo es además, por las pocas contrataciones del equipo.
Koscielny-Mertesacker la pareja habitual de centrales, que es de lo más regular
hasta ahora, en el medio Arteta y Ramsey y más adelante Wilshere, que no tuvo
una buena actuación. Chamberlain que había sido probado en partidos anteriores
como volante central, en este fue extremo junto a Walcott, y más en el centro inició
Podolski.
Fue una buena prueba del Arsenal
ante una oposición mucho más fuerte y contra jugadores de un amplio bagaje; ante esto, los de Wenger no pudieron hacerse con el dominio de balón, lo cual
es su rasgo distintivo. Por el contrario, los de Pellegrini, ya dejando de lado
las formas de Mancini, fue más propositivo, es un equipo más elaborado y
colectivo, no busca sostenerse únicamente con el peso de sus individualidades.
Sin embargo, pese a no tener
demasiado el balón, el primer tiempo defensivo de Arsenal no tuvo grandes
complicaciones, a pesar de uno que otro acercamiento del rival. En elaboración
los ‘Gunners’, presentaban los mismos problemas, entendible porque aún tiene
los mismos jugadores, el equipo sigue siendo muy horizontal y con pocos pases
filtrados, depende en demasía de la inspiración de sus extremos.
El Arsenal dejó una buena imagen |
Ramsey se convirtió en el jugador de la pretemporada, parece ser el más motivado, y es entendible porque todavía genera muchas dudas. El galés le da otro aire al equipo, es ida y vuelta, recuperación y salida. Esta vez, hizo gol y pase gol.
Con la ventaja, Arsenal esperó
más. No fue el equipo intenso y llamativo, pero sorpresivamente, fue el efectivo.
En dos contras, definió el marcador. Muy amplio por cómo estaba siendo el
encuentro. Luego Wenger tenía el tiempo y las condiciones especiales para hacer
lo que más le gusta, probar jóvenes. Entró Zelalem (16 años), entró el colombiano
Pérez (20 años) y entró Hayden (18 años). Por el City, entraron Jovetic, Javi
García, Nasri, Navas.
Los ‘Citizens’, ya habían
demostrado grandes cambios, en especial contra Milan, en Alemania; todavía
tienen una defensa frágil, sin embargo, la mejora en el juego que tanto pedían
sus dirigentes ya es evidente. Arsenal y City cambiaron de roles, hoy quien
tuvo el balón fue el azul, pero quien hizo los goles fue el rojo, vestido hoy de amarillo.
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