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Footbonaut, otra pieza del rompecabezas

El Borussia Dortmund maravilló en esta Champions con su juego alegre y ofensivo que lo llevó a la final. Aquí presentamos la adquisición robótica del conjunto alemán que pretende ser una herramienta más para que el modelo de juego y de la institución sea perdurable. Un método vanguardista.



Toques a ras de suelo, velocidad para desmarcarse, precisión, movilidad, técnica individual. Algunas de las características de este Borussia Dortmund plagado de jugadores jóvenes que construyó el genio de Jürgen Klopp. Pero el entrenador alemán y los directivos del conjunto amarillo han ido un poco más allá y dieron un paso inaudito en la búsqueda de que el modelo sea sustentable en el mediano plazo

Pioneros, adquirieron en el 2012 el Footbonaut, un sistema robótico para el entrenamiento de jugadores de fútbol. El dispositivo le costó al Dortmund más de un millón de euros. ¿En qué consiste el Footbonaut que maravilló a Klopp? El sistema está compuesto de una jaula de 14 metros cuadrados; el jugador (puede llegar a ser usado por cuatro futbolistas al mismo tiempo) queda ubicado en un círculo central y desde allí debe recibir balones y en uno o dos toques colocarlo en uno de los 72 paneles que se iluminan alternativamente. 

Vista aérea

La maquina es capaz de enviar los pases a una velocidad entre 60 y 120 kilómetros por hora; de acuerdo al creador, Christian Guttler, en una sesión de intensidad alta, en 15 minutos un jugador entrega más pases que en una semana entera de entrenamientos. Según palabras de Klopp, quien dio el ok a la compra del dispositivo, esto responde a las formas del club alemán, que no copia sino que decide por convicción propia. 

El Footbonaut se supone que permite una depuración de la técnica, el conocimiento del espacio y una mayor visión periférica. Cuando fue presentado ante la prensa, el jugador australiano juvenil, Mustafa Amini, hizo una pequeña demostración de cómo es el funcionamiento. 



Aquí hacemos un alto. Luego del 4-1 ante el Real Madrid en la ida, el día que Lewandowski se disfrazó de Van Basten, muchos  medios se abalanzaron a afirmar que el Footbonaut era el "secreto del Dortmund". Bueno, no. La maquina comenzó a ser utilizada en el transcurso de la presente temporada y el equipo de Klopp y compañía fue bicampeón en 2011 y 2012 en Alemania, año en que también ganó la Copa.

En verdad, parece ser otra de las muestras de la búsqueda de sustentabilidad en el mediano plazo. El propio Klopp así lo indicó, que pretende que haya una idea que perviva a futuro, esté o no él en el cargo. Y eso mucho tiene que ver con el pasado reciente y no tanto del conjunto que más gente lleva en promedio por fin de semana al estadio en Europa. 

El hombre detrás del Dortmund

De grandes éxitos ha pasado a grandes crisis y cuando asumió el ex técnico del Mainz, la situación estaba cerca de derivar en la bancarrota del club. El licenciado en ciencias del deporte vio la potencialidad que tenía y con la ayuda de un nuevo grupo dirigencial potenció las virtudes del club. 

Así, el Footbonaut intentará ser otra pieza para que no solo el primer equipo mantenga su idea, sino en especial depurar a los jugadores juveniles. Conseguir otro Götze, replicar a un Kagawa, tener un central con la limpieza de salida de Hummels

Reus en el Footbonaut

Sin embargo, no son todos elogios para el Footbonaut -el Milan fue otro de los que se apuntó para la adquisición del dispositivo- ya que algunos mostraron sus reparos. Uno de los entrenadores del Qatar Aspire Football Dream, el belga Michel Bruyninckx, apuntó: "La investigación cerebral nos dice que el aprendizaje óptimo requiere que el entrenamiento de habilidades deba ser incrustado en el ambiente natural de la actividad. Este no es el caso. El hecho de que un jugador deba reaccionar a un sonido no corresponde a la realidad de un juego cuando un jugador reacciona a la información visual”.

Si bien explicó que sí puede servir para mejorar la concentración, también cuestionó que la posición del receptor siempre sea central, ya que en la cancha eso no ocurre siempre de la misma forma. 

En definitiva, hay un margen para la polémica, pero no deja de ser un avance innovador, una de las caras de este Borussia Dortmund que querrá este sábado coronarse a nivel continental y ser rey de Europa.

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