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Alaba, lateral explosivo y con historia..

El joven lateral del Bayern Munich se ganó los elogios de todos por sus actuaciones y se convirtió en una fija en su equipo. Su ceno familiar es altamente extravagante y él tuvo la opción de representar a tres países. Ahora va por toda la gloria en la final de la Champions..



Historias en el fútbol y en la vida, por suerte, sobran aunque cada tanto uno se encuentra con algunas que suenan más extrañas que las demás y está bien podría ser la de David Olatukunbo Alaba, el joven lateral del Bayern Munich que mostró todo su repertorio futbolístico en las semifinales de la Champions frente al Barcelona, pero que hace un tiempo viene dando que hablar. 

A pesar de que su nombre y sus rasgos no sean los indicados con el estereotipo de hombre que nació en Austria, este muchacho es nativo de ese país europeo y surgió en sus tierras el 24 de junio de 1992. Su familia es algo peculiar y ahí es donde se aprecian sus orígenes. Su padre, George, nacido en Nigeria, es DJ y fue cantante del grupo Two In One (les dejamos su hitazo (?) nomás para que lo escuchen y no para lo pirateen) y su madre, por su parte, es una filipina ganadora de un concurso de belleza nacional que actualmente trabaja como enfermera. Como para cerrar el combo de flia singular, su hermana, Rose, se hizo famosa en el Popstars Mission Austria así en las charlas de fin de año les deben sobrar los temas para charlar (?).


La familia Alaba en Navidad

Como verán a este muchacho no se le dio por las artes o los concursos como a los demás integrantes de su familia y decidió ir atrás de una pelota. Sus inicios fueron en el Austria de Viena, team de los conocidos de esa nación, y desde ese momento no se cansó de quemar etapas porque en el 2008 llegó al banco de suplentes del primer equipo. Sus actuaciones ya daban que hablar y el Munich pidió por él, sin embargo, extrañamente, no quiso unirse a las filas del equipo germano ya que en esta etapa “odiaba al Bayern porque llegaban a los campeonatos de canteras con el chándal más fino y los autobuses más bonitos, como si te permitiesen jugar contra ellos”. Dos veces le dijo que no hasta que finalmente acepto. 

Al igual que en su club anterior, en el conjunto bávaro su ascenso fue meteórico y en el 2009 ya estaba entrenando la plantilla superior. Tal fue su progresión que en el 2010 llegó a debutar en Primera y se convirtió en el jugador más joven en hacerlo en el Bayern tanto en la Bundesliga como en Copa y en la Champions. Tras su aparición fue cedido al Hoffenheim para darle algo de rodaje, lo que le sirvió para ganarse un lugar a su regreso en el 2011, un año en que se confirmó que ya no era un promesa sino una realidad y donde alcanzó tres subcampeonatos (Champions frente al Chelsea, Bundes frente al Borussia Dortmund y la Copa de Alemania otra vez con los de Jürgen Klopp).

Igualmente y a pesar de que no se quedó con ningún trofeo, Alaba mostró su forma de jugar en la definición desde los doce pasos frente al Real Madrid en la Champions 2011/2012 cuando tiró el primer disparo de su equipo con la tierna edad de 20 años. Sangre fría para definir en esa ocasión y sangre fría es la que muestra a la hora de jugar, porque no tiene muchos años de experiencia pero juega como si los tuviera. Siempre sale tranquilo desde abajo, toca de primera sin sobrar la situación y siempre con seguridad. Puede jugar tanto de lateral como de volante por izquierda lo que confirma su buena proyección luego de que pasa la mitad de la cancha y llega a zona de ataque. 


Alaba con la casaca de Austria

Gracias a su familia multirracial, David tuvo la oportunidad de optar entre tres selecciones a la hora de representar a un país (Nigeria, Austria e Islas Filipinas) y hasta se habló de una chance en Alemania. Él fue claro y se calzó la camiseta de la nación que lo vio nacer y poco a poco se cargó y se seguirá cargando de partidos con esa casaca. Recientemente festejó la obtención de la Bundesliga, pero aún le queda disputar la definición de la Copa de Alemania frente al Stuttgart, el 1 de junio, y la esperada final de la Champions nada más y nada menos que contra uno de los verdugos de su equipo, el Borussia Dortmund. Por lo visto la gloria lo persigue. 

Su seno familiar, además, lo formó muy religiosamente. Todos forman parte de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, igualmente no lo encasillen señores y señoritas porque Alaba hace su vida normal. Como cualquier hijo de vecino tiene su cuenta de Twitter, donde tiene unos 138,434 seguidores y una página de Facebook sitio que tiene hasta fotos durmiendo de este muchacho que a base de buenas actuaciones se ha ganado el respeto del mundo futbolístico y confirma que el Bayern tiene lateral izquierdo para rato..

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