El Atlas se llevó un importante triunfo ante el América, equipo que marchaba invicto hasta este sábado. Tres puntos fundamentales para el Rojinegro que busca quedarse en la máxima categoría del fútbol mexicano. El equipo de nuestro cronista dejó el sótano en la tabla de promedios.
Y si… hay veces que
Dios se hace presente, hoy sin dudas tuvo la rojinegra bien puesta, el
Atlas apostó a jugarle al tú por tú al América, un equipo grande, que marchaba invicto y con paso perfecto en
el Clausura. Con muchísima fortuna, esa que otras veces nos es esquiva le
ganó, se puso dos puntos por delante del Querétaro y nos mantiene soñando una
semana, soñando con un presente a todas luces y con la esperanza de ver un
Atlas entregado, competitivo y ganador.
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| La súplica de Bocanegra... |
En el Jalisco el ambiente era de fiesta, nos visitaban las Águilas para dar colofón a una semana que había estado bastante revuelta: el embargo de bienes al club, las declaraciones de Tomás Boy, la incertidumbre de saberse últimos en la tabla de
cocientes… y la visita del Ame, para cerrar, no se suponía que fuese
sencillo… y no lo fue.
Ya por la tarde Gallos
Blancos y Puebla habían caído en sus respectivos partidos, por lo que el encuentro ante las Águilas, se tornó de enorme trascendencia, dejar el sótano era
la prioridad.
El partido comenzó y el Atlas mostró buenas maneras, los
primeros 25, 30 minutos fueron de dominio rojinegro, sin inquietar en demasía la
cabaña de Moi Muñoz, sin embargo América comenzó
a ser más y terminó por facturar cuando ya era superior en el trámite del
encuentro: gol de Diego Reyes al 42
parecía ponerle justicia al marcador.
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| Robles, batallador incansable |
Pero el Atlas no se rindió, con el ingreso de Guillermo
Martín en el entretiempo, el rojinegro ganó en velocidad en la zona baja, en
determinación y en carácter, no cabe duda que nadie siente tanto los colores
como la cantera.
Y entonces, el chino
Millar (de discreto primer tiempo) prendió una pelota en la zona limítrofe
del área grande, y con un disparo raso y colocado horadó la meta de Muñoz, para
sentenciar el 1 a 1 recién comenzado el complemento.
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| El Crack Chileno ya impactó el balón que se convertiría en gol. |
De ahí en más el cuadro tapatío continuó apretando aunque
pasó varios sobresaltos en zona baja, una y otra vez Miguel Pinto y los postes
le dijeron que no a los azulcremas, al
menos cuatro balones se estrellaron en el metal, por eso es que hoy Dios
fue rojinegro…
Un penalti, para muchos discutido, para mí claro… nos dio la
oportunidad de ponernos por delante cuando Omar
Bravo lo cambió por gol, "¿Cuánto falta?" me pregunté, eran aún 15 minutos, ya
con el equipo por delante en el marcador, Tomás Boy tiró de la experiencia de
Lucas Ayala para contener los embates americanistas, el chileno Millar salió aplaudido del terreno de
juego; no cabe duda que es un tipo distinto, hoy mostró pinceladas de jugador
de categoría.
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| Bravo y la sana costumbre de festejar |
El tiempo transcurrió y no quiso escribir nada en un libreto
que para Atlas salió perfecto, ni en los cuatro eternos minutos de
agregado, las Águilas vinieron al
Jalisco a perder la punta, el paso perfecto y el invicto, ante un corajudo
e impetuoso Atlas, ese que sabe que semana a semana se juega la vida en la
categoría de oro del futbol mexicano, ese que a pesar de los problemas
extracancha se deja la piel en cada jugada, así como Robles, como Martín, como
Erpen… nunca dejen de luchar rojinegros, que la luz está cada vez más cerca.
Resumen del partido (lamentable narración del penalty)
Capítulos anteriores de Sufrir, sufrir contigo
Prólogo
Capítulo I: Indolencia
Capítulo II: Por fin volviste
Capítulo III: Cara a cara con el abismo
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