Futbolistas trotamundos: Emiliano Lattes..

Hay historias de vida que merecen ser destacadas y el fútbol está lleno de ellas, algo que comenzaremos a hacer con esta nueva sección, la cual hizo su debut con jugador argentino que se destaca en Malta. Dialogamos con este delantero, quien nos narró su carrera y cómo es su vida en esas tierras lejanas..

Lejos de la fama y la fortuna con la que gozan muchos jugadores argentinos, esos que brillan en las grandes ligas de Europa o el mundo, existen otros representantes nacionales que decidieron seguir sus sueños e ir dónde los lleve una pelota. De esta forma muchos suman experiencia en ligas no tan conocidas o en algunos casos prácticamente impensadas para muchos de los que creen que al fútbol solo se juega en los países importantes y en este rubro podríamos ubicar a Emiliano Lattes, un delantero con sangre bien argenta que llevó su amor por la redonda hasta Malta.


Saltearse un punto de su carrera es saltearse una historia o lugar para conocer, ya que a pesar de los gustos, seguramente, la mayoría estaría más que interesado en conocer España, República Checa o bien su destino actual, pero por este motivo lo mejor será comenzar por el inicio y desde aquí la cuestión ya empieza a ser paradisíaca, porque Emi nació, se crió y pateó por primera vez una pelota en Mar del Plata.


"Inicié mi carrera a los cinco años en uno de los clubes más populares de mi ciudad: Aldosivi. Mi puesto original fue de delantero central o por las puntas, y en Europa por lo general me hicieron jugar más retrasado, por las bandas, aunque tratando de llegar al área rival, me caracterizo por la velocidad, rendimiento físico y entrega total hasta el minuto 90", contó Lattes en diálogo con Cultura Redonda.

Emiliano con la casaca del Unión Criptanense

Antes de pegar el salto al Viejo Continente, Emiliano pasó por de Racing, Kimberley, Unión, Al Ver Verás, Boca, todos de Mar del Plata, Chacarita y Platense, en lo que podría definirse como una extensa carrera para un joven jugador. Pero como siempre para cumplir un sueño hay que hacer esfuerzos y pasar por diferentes equipos puede ser una de las opciones para alcanzar una meta y más en un ámbito tan complicado como el mundo de la redonda.  


Tras su paso por el fútbol nacional, el próximo destino fueron las tierras españolas, donde se puso la camiseta de varios equipos del ascenso (CD Guijuelo, Gimnástica Segoviana CF, CD Caspe, Moralo CP y CD Unión Criptanense). "El fútbol de ascenso español es bastante mediocre, se juega distinto a como se entrena, los toques de la semana se convierten en pelotazos hacia el campo contrario. La vida social es bastante tediosa, ya que por lo general, son pequeños pueblos con pocos atractivos y como casi todos los oriundos, además, deben trabajar, más allá de los entrenamientos y días de partido, la constante es la soledad del departamento donde uno vive", relató Lattes sobre su vivencia en España. 

En su paso por República Checa

En medio de su paso por la Madre Patria, este delantero tuvo su primera experiencia fuera de lo normal, porque jugó un semestre en la Druhá liga (la segunda división de República  Checa) en el FK Baník Most. "El fútbol checo es muy físico, los clubes son muy organizados y equipados, como experiencia, ahí fue donde me sentí por primera vez un verdadero jugador profesional, por todo el entorno que me rodeaba. Lo negativo era la dificultad para comunicarme a pesar que hablo perfectamente el idioma inglés", señaló el punta sobre ese momento de su carrera.


Si pensaron que hasta aquí su historia era particular o extraña, todavía no contamos la parte más peculiar, claramente, porque aún falta lo más jugoso: su arribo a Malta. "Al fútbol maltes llegué de casualidad, yo nunca tuve agente o representante (grave error, jeje), un buen día por una página de futbolistas y entrenadores, se puso en contacto conmigo un agente nigeriano de nacionalidad austriaca y me ofreció ir a tentar suerte a ese hermoso y pintoresco país. Lamentablemente el club de Premier League al que llego (Msida St  Joseph FC), estaba pasando una pésima situación económico-financiera y desciende. Asimismo logro destacarme y me convoca el Sliema Wanderers FC para jugar eliminatorias de UEFA Europa League, pero al quedar eliminados, vuelvo a quedar libre y el mismo día me contrata el Birkirkara FC, donde tuve una temporada excelente y fui elegido mejor jugador de la temporada 2010/2011. Hoy siento que soy muy considerado por la afición maltesa y podría quedarme hasta que decidiera retirarme de la competencia", relató el marplatense. 


"No existen demasiadas diferencias entre un fútbol y otro, lo más notable reside en la calidad de los jugadores. El nivel lo dan los extranjeros que contrata cada club y es muy lógico, ya que Malta tiene una población de 400.000 habitantes, cosa que no permite mucho margen para que haya demasiados jugadores con habilidades innatas", describió en su narración y además agregó: "En Malta se juega como en la mayoría de los países europeos, se intenta el buen trato del balón pero se complica cuando llega el momento de aplicar la parte técnica de la cual la mayoría de los jugadores malteses carecen. Los entrenamientos son muy profesionales en los clubes más importantes de la isla". 

Emiliano dejando rivales en el camino en el Msida St Joseph

Al campeón de la liga maltesa, la UEFA le otorga una plaza para la Champions League, mientras que el segundo obtiene un lugar en la Europa League y según las palabras del propio Emiliano "podría decirse que el fútbol es el deporte de mayor arraigo", aunque "no concurre la cantidad de gente que me gustaría".  Por lo general no asiste mucho público a los estadios, salvo cuando se generan clásicos entre los grandes, te diría que oscila entre 1500 y 8000 personas por jornada doble jugada en el hermoso Estadio Nacional Ta' Qali", señaló. 


"Me encanta vivir en Malta, un día de semana empieza muy temprano, voy al gimnasio, se entrena por la tarde y por lo general al final del día nos reunimos en alguna casa entre los pocos argentinos que allá viven (últimamente éramos cuatro) y se nos agregan algunos brasileños y algún otro latinoamericano, las distancias son cortas y los lugares de esparcimiento son muy lindos y entretenidos. El día anterior al partido me recluyo temprano, las dobles jornadas se desdoblan en tres, y nos puede tocar jugar viernes, sábado o domingo alternativamente. Algo bueno extra, es, que incorporé un nuevo idioma a mis conocimientos, lo entiendo y puedo contestar en ingles, que es el la otra lengua que usan", tiró de su vida cotidiana en esas lejanas tierras. 

Igualmente y a pesar de mostrarse feliz con su presente, hay algo que, como a todo argentino, le tira para el lado de la nostalgia. "De la Argentina extraño a mis padres, hermanos, mi sobrinita Milagros, mis amigos; el resto se reemplaza o se consigue. Jamás me falta yerba para el mate. Cuando algún conocido va relativamente cerca seguro nos acercan alguna caja de Havanna (alfajores: nota de CR) o bizcochitos 9 de Oro", detalló, pero a su vez dejó en claro que no es por lo único por lo que se angustia, ya que "sigo y sufro con el fútbol argentino y con mi querido San Lorenzo".

"Me gustaría jugar en la Argentina, siempre intentamos con mi papá comentando o tratando de hacer distintos contactos. Como comenté no tengo representante y eso hace muy difícil la cosa, por lo general los tiempos no coinciden, ya que debo regresar y acá todavía no finalizo el torneo. Como sucede cada año seguramente agregaré una clausula al nuevo contrato que dirá que si sale alguna oferta mejor fuera de Malta podré irme. Quien te dice, algún día, alguien me convoque. Nos conocemos con (Ricardo) Caruso Lombardi, pero no lo pude ubicar para darle mi apoyo en el salvataje del 'Ciclón' y ponerme a su disposición para la próxima temporada, sí es que se queda", explicó Emiliano y con esas palabras dejó en claro sus ganas de calzarse la camiseta de algún team argentino. 

Como todo fanático del fútbol, Lattes tiene jugadores fetiche y aunque es prácticamente contemporáneo a la Pulga, no ocultó su fascinación por el talento del rosarino y mencionó: "Mi ídolo futbolístico es Lionel Messi. Admiro lo que hace y hasta siento que se supera a sí mismo partido tras partido. Cando él juega, verlo incondicionalmente, es otra de las cosas que hacemos en Malta". 

"Yo nací para jugar al fútbol y agradezco a dios poder vivir de lo que me gusta, así como un día llegue a Malta, espero, el destino me depare algo nuevo y mejor para mí futuro, dentro de este maravilloso deporte", finalizó este argentino que se destaca en tierras muy lejanas y que aún disfruta de perseguir su sueño, ese que muchos tienen, pero que pocos lograron: vivir de una pasión o de algo te llena el alma, como lo es el fútbol..

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