Los qataríes van por todo. Luego del fracaso que supuso la no obtención de la Ligue 1 a manos del modesto Montpellier, sacaron petrodólares a lo loco y ficharon a Lavezzi, Thiago Silva e Ibrahimovic. ¿Un candidato a la Champions?
Si el domingo hablábamos del fútbol amateur, de las bondades de jugar por la camiseta y el placer de hacer deporte, ahora nos vamos en la dirección opuesta. El Paris Saint-Germain (PSG) viene agitando el frío mercado de pases en Europa, un reflejo de la brutal crisis económica que azota el continente y se expande al resto del mundo.
Ya comentamos en otros artículos, cómo los capitales árabes irruempieron ahce un tiempo. Contamos la historia del City, nos debemos la del Málaga, y acá nos ocupamos del caso del PSG, que al igual que el conjunto español es manejado por fondos provenientes de Qatar.
El QIA (Qatar Investments Authorities) compró hace poco más de un año el porcentaje mayoritario de las acciones del club parisino en 50 millones de euros. A partir de allí, el jeque Tamim bin Al Thani, de quien pueden conocer un poco más su historia personal leyendo esta nota, se ocupó de armar un equipo de elite. Pese a sus inversiones millonarias, la primera temporada fue un fracaso.
No necesariamente por salir en segundo lugar, sino porque quien terminó coronándose, el Montpellier, había invertido 100 millones de euros menos que los parisinos. Además, el PSG se quédó eliminado en la fase de grupos de la Europa League y no logró avanzar en las copas nacionales.
Pese a eso, el equipo que tiene a Leonardo en la secretaría técnica y que sumó a Carlo Ancelotti (cuando asumió con la temporada ya empezada, el equipo marchaba primero en la Ligue 1) como entrnador, finalizó en segundo lugar con boleto para jugar la Champions League este año. Ese parecería ser el objetivo del club para la 2012/2013.
El primer bombazo de este mercado estival en Europa lo dio cuando sumó a Ezequiel Lavezzi, uno de los pilares de las grandes campañas del Napoli en los últimos años. Pagó cerca de 27 millones de euros por el pase del delantero rosarino. Sin embargo, sería el primero de los tres grandes refuerzos que hizo el equipo parisino.
Los otros dos llegarían desde Italia también; más precisamente desde Milan. Es que el PSG se llevó a los dos mejores hombres del conjunto Rossonero: Zlatan Ibrahimovic y Thiago Silva. Por el delantero sueco no están claras las cifras pagadas, pero se habla de 23 millones, además de asegurarle al delantero un contrato anual neto de 13 millones.
Por el zaguero brasilero la suma fue mucho más alta: 40 millones. Silva era uno de los objetivos de los equipos más importantes del mundo, y fue París finalmente su destino. Esta serie de fichajes logró que jugadores ya instalados en equipos de elite, y no con papeles de reparto, se movieran hacia el Sena. Es que tanto Pato, como Tévez o Kaká rechazaron las propuestas del PSG.
Cabe recordar, que las compras fuertes habían empezado la temporada pasada, cuando Javier Pastore fue el refuerzo top (42 millones de euros). En el parate de invierno, los qataríes pusieron los ojos en Maxwell (Barcelona) y Thiago Motta (Inter) y se quedaron con sus servicios.
Si repasamos el supuesto equipo base de los parisinos para esta campaña, nadie podría descartarlos: Sirigu; Jallet, Thiago Silva, Alex, Maxwell; Motta, Sissoko; Menez o Nené, Pastore, Lavezzi; Ibrahimovic. En total, las inversiones del PSG desde la llegada del QIA superan los 200 millones de euros.
Sin embargo, en este tiempo quedó claro que grandes inversiones no es sinónimo de resultados deportivos. Lo vimos la temporada pasada con el PSG, también cuando analizamos lo que le costó al Manchester City quedarse con la Premier y su pésima campaña en Europa, o si observamos que al Chelsea de Roman Abramovich la Champions League le llegó luego de años y años de descalabros económicos.
También en este listado podríamos agregar al Real Madrid de Florentino Pérez, que hasta el momento (¿un reflejo del recorte económico en España?) no gastó un solo euro en fichajes y por el contrario sí ha logrado vender jugadores del filial o que eran suplentes la última campaña.
También en este listado podríamos agregar al Real Madrid de Florentino Pérez, que hasta el momento (¿un reflejo del recorte económico en España?) no gastó un solo euro en fichajes y por el contrario sí ha logrado vender jugadores del filial o que eran suplentes la última campaña.
Quedan algunos interrogantes, como por ejemplo saber si Ancelotti es el hombre ideal para comandar este proyecto o pensar en cómo se acoplarán los diferentes fichajes, y sólo el devenir de la temporada develará esta incógnita. Hay promesa de buen fútbol en París; los petrodólares lo hicieron posible una vez más. C'est la vie.
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