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Sin Yaya Toure no hay Manchester City


Everton le ganó al Manchester City en Goodison Park, en una gran actuación del equipo local en todo su conjunto y ante una floja oposición de los celestes. Osman y Jelavić  los goleadores. Sin el marfileño Mancini no encuentra soluciones.


Se sabía que la liga estaba complicada para el City. Eran doce puntos que debía restarle a su clásico rival, Manchester United, y quedan cada vez menos fechas. Igualmente, más que alcanzar al puntero, debería Mancini poder solucionar un problema: reemplazar a Yaya Touré, quien hoy no pudo jugar por una migraña.

Osman festeja el primero

Se notó su ausencia; su equipo fue poco profundo y le costó hacer la transición de ataque a defensa. No pudo frenar a Gibson – de excelente partido- y no logró hacerse profundo. No tenía como generar situaciones. Faltaba él.

Mancini se la rebuscó, trató de innovar: salió con línea de tres (Zabaleta, Kolo Touré y Nastasic) cuatro volantes y doble enganche: Tevez y David Silva, para asistir a Edin Dzeko. Y ya explicamos lo que fue su equipo, de nada sirvió el doble enganche y poblar el mediocampo con seis personas. Barry impreciso, Javi García retrasado, dando una mano en el fondo. Kolarov no figuró y Milner fue, dentro de la pobreza de su equipo, lo mejor del primer tiempo.

Más se complicó la historia cuando a los 32 minutos Leon Osman abrió el marcador para los de azul, que jugaron un partidazo. No sólo se puede enfocar la derrota en la falta de ideas y de planificación del City; su rival le complicó la existencia durante los 90 minutos del juego. Fellaini manejó hilos, Anichebe arriba volvió loco a los dos centrales y el lateral derecho Coleman dejó un surco terrible por su banda, de área a área.  E incluso el dolor pudo ser mayor, cuando a Mirallas le anulan, mal, un golazo.

El segundo tiempo se ordenó el City, llegó más arriba, pero seguía faltándole algo. Se armaron nuevamente las dos líneas de cuatro y Tevez y Dzeko quedaron de puntas. Había que remontar el resultado, el City lo sabía y buscó con una buena asociación de Milner y Zabaleta por la derecha. Destellos de Silva, que tuvo poco contacto con la pelota y la subida de Kolarov.

Mucha le tapa el gol a Zabaleta 
Pero no se supo aprovechar los errores del rival. A la hora de juego, Pienaar le pegó feo a Javi García, estaba amonestado y vio la segunda; con uno menos y ganando 1-0, Everton se replegó. Mancini recién hizo ingresar a Nasri a los 70’ –que con veinte minutos de juego, generó más que Silva, Tevez y Dzeko en todo el encuentro y trató de tener la pelota y jugar, pero ahora el que se lucía era Mucha, portero del local, que le atajó un remate a Zabaleta y otro a Tevez que podrían haber emparejado el partido.

Tevez encara para el área, patea y la pelota de claramente en la mano de Fellaini adentro del área, y el árbitro, Lee Probert, no dudó, pero lo cobró afuera en un horror que podía haberle dado un penal al City faltando cinco minutos para el final. Y fue peor el cierre, porque Jelavić hizo, de contra, un golazo de emboquillada, que sentenció un partido paupérrimo del City.

Jelavic festeja el tiro de gracia

El hombre del medio, el que domina el juego es Yaya Touré y no tiene reemplazo. Mancini no tiene un hombre que lo pueda suplir, ni tiene ideas para poder solucionar su ausencia. En las transferencias nunca se buscó un enganche, pero se trajo a Javi Garcia, 5 de contención. Hoy Javi pasó desapercibido.

Mancini debería plantearse el destino de un Manchester City que no juega, no disfruta y llega poco al arco rival sin Yaya Touré en cancha. Cambia tácticas pero no gana partidos y ahora podría quedar a quince puntos del United si este consigue ganar.

Sin Premier, eliminado de la Champions, sin entrar a la Europa League, el team sky blue tendrá que apuntar a la F.A Cup para salvar el año, además de descubrir a qué quiere jugar.

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