Todos recuerdan al equipo del Mundial de Corea-Japón, pero de ese tiempo a esta parte los senegaleses no han participado de una competición de renombre. Ahora buscarán volver a la vieja gloria.
Les Lions de la Teranga (los leones de la hospitalidad, mezcla de francés y wolof) están de vuelta en la élite del fútbol africano. Tras tres mundiales y una CAN consecutivas sin participar, Senegal ha vuelto a nuestras vidas con el recuerdo eterno de su rendimiento en Corea-Japón 2002 de la mano del fallecido Bruno Metsu quien dirigió a Diouf, Bouba Diop, Camara, Diao, Sylva, Cissé entre otros, llegando a cuartos de final en aquel torneo.
Les Lions de la Teranga (los leones de la hospitalidad, mezcla de francés y wolof) están de vuelta en la élite del fútbol africano. Tras tres mundiales y una CAN consecutivas sin participar, Senegal ha vuelto a nuestras vidas con el recuerdo eterno de su rendimiento en Corea-Japón 2002 de la mano del fallecido Bruno Metsu quien dirigió a Diouf, Bouba Diop, Camara, Diao, Sylva, Cissé entre otros, llegando a cuartos de final en aquel torneo.
Historia
Desde el inicio de la competición en 1957 hasta 1988 sólo había
participado en tres ocasiones donde destaca la edición de 1965. Segundo de grupo,
perdieron el tercer y cuarto puesto con Costa de Marfil (la final la disputaban
los primeros de grupo). En 1968 y 1986 no pasaron de la primera ronda. En 1990
volvían a disputar un partido por el tercer puesto tras caer en semifinales con
Argelia, el elenco campeón de aquella cita.
En cinco torneos entre 1992 y 2000 acudieron a tres, donde fueron eliminados de forma reiterada en cuartos de final. En 1996 y 1998 no clasificaron. La mejor generación de su historia llegó a la final de 2002 dando un aviso al mundo de lo que podía realizar meses después en la cita mundialista. En Malí fueron superados por Camerún en la fatídica tanda de penales tras fallas Aliou Cissé, Diouf y Faye tras el 0-0 final. En 2004 el verdugo fue el organizador y campeón Túnez en la fase de los ocho mejores. Dos años después, otro anfitrión y campeón (Egipto) fue el encargado de apartar a los senegaleses en semifinales. Esa fue su última gran aparición ya que en 2008 y 2012 no fue capaz de pasar de ronda de grupos y en 2010 y 2013 no clasificó al certamen continental.
En cinco torneos entre 1992 y 2000 acudieron a tres, donde fueron eliminados de forma reiterada en cuartos de final. En 1996 y 1998 no clasificaron. La mejor generación de su historia llegó a la final de 2002 dando un aviso al mundo de lo que podía realizar meses después en la cita mundialista. En Malí fueron superados por Camerún en la fatídica tanda de penales tras fallas Aliou Cissé, Diouf y Faye tras el 0-0 final. En 2004 el verdugo fue el organizador y campeón Túnez en la fase de los ocho mejores. Dos años después, otro anfitrión y campeón (Egipto) fue el encargado de apartar a los senegaleses en semifinales. Esa fue su última gran aparición ya que en 2008 y 2012 no fue capaz de pasar de ronda de grupos y en 2010 y 2013 no clasificó al certamen continental.
El Camino a la Copa
Senegal clasificó segundo en un grupo harto difícil con selecciones de
renombre como Egipto y Túnez. Ganó todos sus encuentros salvo el doble
enfrentamiento con las Águilas de Cartago donde cosechó un punto sobre seis.
Cabe destacar que fue el elenco que menos goles recibió (8 GF, 1GC) junto a
Camerún en toda la fase de clasificación en África.
- Senegal 2-0 Egipto (Mame Diouf y Mané)
- Botsuana 0-2 Senegal (Mané y N'Doye)
- Senegal 0-0 Túnez
- Túnez 1-0 Senegal
- Egipto 0-1 Senegal (Mame Diouf)
- Senegal 3-0 Botsuana (Mbodji, Papiss Cissé y Sow)
Posiciones: Túnez 14, Senegal 13, Egipto 6 y Botsuana 1.
El Juego
Giresse suele
plantear los partidos con un 4-2-3-1 que muta en el repliegue a un 4-4-2 con
los extremos Mané y Badji posicionándose en la misma línea de mediocentros
junto a Gueye y Kouyate. La idea de juego es intentar desequilibrar por ambas
bandas, ya sea con Badji en menor proporción que con Sadio Mané. El sector
izquierdo del ataque senegalés es su arma más poderosa ya que M'Bengue se
aprovecha de las diagonales de Mané para proyectarse una y otra vez. También
Sow suele caer a ese flanco para dejarle el carril central libre a las llegadas
potentes de Kouyaté desde segunda línea o N'Doye por detrás, en la mediapunta.
La defensa junto al
portero son de lo más seguro de África, solo encajaron un tanto en la
clasificación. El equipo no queda nunca en desventaja en transiciones
defensivas gracias a la rápida y física dupla de mediocentros. En defensa
organizada, más de lo mismo, ya que el repliegue es a escasos metros de la
mitad de la cancha, en campo rival. Tímida presión en la gestación rival con el
balón. Muy ordenado y organizado. El mediapunta y el delantero esperan la
recuperación del esférico en línea simétrica. El seguro juego aéreo es otro
punto álgido del elenco de Giresse. El nexo con la línea ofensiva es Gueye
quien baja a recibir en primera fase y se encarga del trabajo de romper líneas
con pases certeros. Cabe distinguir que pese a la gran nómina de delanteros
alrededor de las mejores ligas del viejo continente, a la hora de materializar
las ocasiones de gol, el porcentaje es bajo y debe ser mejorado.
Las salidas desde
portería suelen buscar en largo a uno de los delanteros para que éste prolongue
hacia los costados buscando el desequilibrio por la velocidad de los extremos.
N'Doye se encarga de las faltas centradas o laterales, aunque la distancia sea
considerable, el jugador del Lokomotiv de Moscú se adueña de la pelota para
ejecutar cada tiro libre. Una sólida defensa,
una mediocampo con técnica y potencia, y el resultado de unir: combinación,
explosión y verticalidad en 3/4 dan a Senegal como una de las posibles
selecciones "tapadas" del torneo.
El Fixture
- 19-1 –vs- Ghana
- 23-1 –vs- Sudáfrica
- 27-1 –vs- Argelia
Entrenador
Alain Giresse
El ex jugador francés, miembro de una gran generación de futbolistas de
su país en la década de los '80, se hizo cargo de la selección senegalesa a
principios del 2013.
Tiene experiencia dirigiendo en aquel continente ya que entrenó a
Gabón, Malí y el FAR Rabat de Marruecos. Su inicio como director técnico fue en
Toulouse en dos etapas, en medio la oportunidad en PSG y la selección de
Georgia.
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